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BARCELONA, 7 Abr. (EUROPA PRESS) -
Los Mossos d'Esquadra abordaron en 2012 un total de 31 casos de niñas pequeñas en riesgo de sufrir una ablación, de los que seis se han consumado, mientras que este año se han registrado ocho casos.
En una entrevista de Europa Press, la coordinadora de la Unidad de Apoyo a la Atención de Víctimas de la Conselleria de Interior, Alba Alfageme, ha detallado que los casos que les llegan al departamento son una ínfima parte de la realidad, ya que están ante "una gran problemática que no aflora".
Según ha indicado, en los últimos dos años se han encontrado con que las familias que quieren mutilar a sus hijas, siempre en un viaje de regreso a sus países de origen, "ahora lo hacen de manera más velada y soterrada, usando mecanismos para llevarla a cabo sin levantar sospechas", puesto que saben que están incurriendo en un delito penado con entre seis y 12 años de prisión según el artículo 149.2 del Código Penal.
También han detectado que hay muchas niñas que se van a sus países y ya no vuelven, cuando antes había más retornos; antes la familia avisaba a las niñas cuando se preveía un viaje a su país de origen y ahora ni siquiera se las informa y hacen "viajes más sorpresa" para no levantar sospechas en el entorno escolar y médico de la menor.
DE 0 A 6 AÑOS
La mayoría de casos se registran en comunidades de países de África subsahariana, entre ellos Senegal y Gambia, y la edad de las niñas oscila entre los cero y seis años, ha indicado la técnica de Interior, que sin embargo también puntualiza que cada vez hay más familias concienciadas que rechazan esta práctica.
Desde 2009, cuando se registraron 55 casos, la tendencia ha sido bastante similar, con 28 casos en 2010, 36 en 2011 y 31 este 2012, y en una media del 70% de los casos se ha conseguido evitar.
La presidenta de la Asociación de Mujeres Inmigrantes Subsaharianas (Adis), Bombo Mdir, ha explicado a Europa Press que las familias optan por practicar la ablación a sus hijas por una mezcla de tradición y estereotipos, que les hacen creer que si no están mutiladas "no serán buenas mujeres ni conseguirán casarse".
"La mujer africana es reconocida por el marido y por tener hijos", y si no ha pasado por la ablación en las comunidades donde se practica, socialmente se la considera alguien sucio, impuro, contrario a la religión musulmana y por lo tanto es rechazada.
La ablación genera importantes problemas en la sexualidad de la mujer y en su salud, y desde la asociación trabajan para desmontar mitos, tanto entre las mujeres como entre los hombres, para que tomen conciencia de la gravedad de una intervención de este tipo.
La asociación, creada en 2004 y en la que participan 22 mujeres, tiene entre sus principales objetivos luchar contra esta práctica y trabajar temas de género de manera trasversal, y entre otras cuestiones promueve que las mujeres mutiladas se operen.
La reconstrucción genital es gratuita y dura unos 45 minutos, y según cifras de 2012 de la Fundación Dexeus, donde se practica, en 4 años se han realizado 39 operaciones, aunque según Mdir, el problema es que hay una larga lista de espera.