BARCELONA, 18 Jun. (EUROPA PRESS) -
El grupo parlamentario del PP catalán ha propuesto este martes en la comisión del Parlament de la Sindicatura de Cuentas de Catalunya que este organismo fiscalice la gestión contable y económica de las aportaciones de capital público a Spanair desde que la aerolínea fue adquirida por inversores catalanes públicos y privados en 2009.
El diputado popular José Antonio Coto ha cifrado en más de 200 millones de euros "los impuestos de los catalanes que a día de hoy no se han recuperado y se han perdido", y ha pedido que se audite qué se hizo y qué ha pasado con este dinero.
Ha lamentado que la aerolínea acabó desapareciendo y destruyendo empleo, en lo que ha sido "un modelo de fracaso que los catalanes han debido pagar de su bolsillo".
La propuesta de resolución del PP se votará este jueves --para cuando los grupos se han reservado su posicionamiento, aunque C's ha avanzado que apoyará la petición--, siguiendo el procedimiento habitual, y llega después de que en abril la Sindicatura de Cuentas hiciese referencia a Spanair en un informe de fiscalización del Institut Català de Finances (ICF), que invirtió en la compañía aérea, lo que el ente adscrito al Parlament calificó de operación de "elevado riesgo de crédito".
Tras este informe, el PP barcelonés ya pidió que la Sindicatura auditase las ayudas públicas de Barcelona a Spanair, y calculó que la capital catalana perdió 107 millones de euros para promoción económica por destinarlos a la aerolínea a través de Fira de Barcelona (36 millones), Turisme de Barcelona (27 millones), Catalana d'Iniciatives (19 millones) y un préstamo de 25 millones a la Generalitat.
Según dijo entonces el portavoz adjunto del PP en el Ayuntamiento de Barcelona, Javier Mulleras, la valoración de la Sindicatura "confirma que los criterios políticos nacionalistas anularon los criterios económicos en la inversión que se hizo sobre Spanair".
"Con Spanair hemos dilapidado los impuestos de los ciudadanos aplicando criterios políticos y no económicos en las inversiones públicas de Barcelona, financiando una compañía aérea en quiebra", criticó, y argumentó que el Aeropuerto de El Prat siguió creciendo en pasajeros pese a la desaparición de la compañía y la crisis.
