La presidenta del ICD destaca la necesidad de abandonar la división sexual del trabajo
BARCELONA, 7 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha llamado a hacer que la igualdad formal que han logrado las mujeres sea una realidad, y a evitar el peligro de una "potencial involución creciente" que se está extendiendo a nivel mundial, que ha visto tanto en declaraciones de líderes políticos como en comentarios en las redes sociales, que normalizan del machismo.
"Catalunya no está dispuesta a contribuir a esta involución", ha afirmado en su discurso en el acto institucional del Día de la mujer que ha acogido la Generalitat este martes, y ha llamado a hacer un esfuerzo conjunto para lograr el empoderamiento y la visibilización de las mujeres, que no solo beneficiará al 50% de la sociedad que representan, sino al 100%.
Ha afirmado que el Govern trabaja en materializar la perspectiva de género en todas las políticas publicas para llegar a una sociedad igualitaria, y ha llamado a hacer un cambio en comportamientos y actitudes para superar una realidad en la que "los hombres tienen ventajas por el hecho de ser hombres".
Han asistido la presidenta del Parlament, Carme Forcadell; el vicepresidente del Govern, Oriol Junqueras, y los consellers Neus Munté, Raül Romeva, Meritxell Borràs y Meritxell Serret, además de la presidenta del Institut Català de les Dones (ICD), Teresa M. Pitarch, diputados y representantes de entidades, en un acto que ha cerrado una actuación de la cantante Maria del Mar Bonet.
Pitarch ha lamentado que, a pesar de la incorporación masiva de las mujeres en el entorno laboral que se dio en el siglo XX, existen prejuicios "sólidamente integrados" que hacen que el trabajo de las mujeres esté peor considerado y remunerado, así como la creencia de que la conciliación es un problema solo de las mujeres, obligándolas a elegir entre maternidad y carrera profesional.
CORRESPONSABILIDAD
La presidenta del ICD ha apostado por una nueva forma de entender la responsabilidad compartida que permita "superar la división sexual del trabajo", a la vez que reconocer el conocimiento y el talento de las mujeres, así como darles visibilidad.
Puigdemont ha afirmado que Catalunya no se puede permitir ver cómo, año tras año, se constata que existe la brecha salarial y las desigualdades en el trabajo, que a largo plazo generan pensiones menores y mayor riesgo de pobreza en las mujeres, así como el hecho de que dos de cada tres empresas en Catalunya no tienen a mujeres en su equipo directivo.
"Los datos contradicen las prácticas" y hay estudios que demuestran que la presencia de mujeres en los puestos de toma de decisiones tiene consecuencias positivas también a nivel económico.
"Hace falta romper las barreras que hacen que solo un 26% de las mujeres acceden a carreras tecnológicas", lo que ha calificado de muy grave, teniendo en cuenta la importancia de este sector económico en el futuro cercano en Catalunya, y ha lamentado también la infrarepresentación de las mujeres en los espacios de opinión en los medios, en la cultura y en el deporte.
La directora del Observatori Dona, Empresa i Economia (Odee) de la Cámara de Comercio de Barcelona, Anna Mercadé, ha explicado que existe una cultura empresarial y social llena de pequeños obstáculos, que no deja crecer laboralmente a las mujeres e "impide a la sociedad beneficiarse del talento del 50%" de las personas, las mujeres.
Ha lamentado que socialmente se atribuye a las mujeres todo el trabajo de cuidados, a la vez que el mundo laboral lo penaliza: "Arrastramos una sociedad patriarcal dividida en roles milenarios según el sexo", así como una cultura empresarial con una mirada masculina, y ha llamado a eliminar tanto estos roles como las estructuras, horarios y costumbres que perpetúan esta división.
