Abre el simposio 'A 80 años del golpe de Estado de Franco'
BARCELONA, 1 Dic. (EUROPA PRESS) -
El conseller de Asuntos y Relaciones Institucionales y Exteriores y Transparencia, Raül Romeva, ha reivindicado este jueves la memoria histórica como una herramienta para "levantar las alfombras" del franquismo, una etapa que ha calificado de oscura y sobre la que hay que arrojar luz para construir los cimientos de un nuevo país.
Romeva ha inaugurado el simposio 'A 80 años del golpe de Estado de Franco' con el director del Centre d'Història Contemporània de Catalunya (CHCC), Jaume Sobrequés, y del vicepresidente del Institut d'Estudis Catalans (IEC), Jaume de Puig.
Ha destacado que el simposio, que se acabará el sábado, es parte de la voluntad de "acabar con el silencio, con esa voluntad de pasar página sin levantar alfombras" de ese periodo, que Romeva asegura que debe analizarse, estudiarse y, en algunos casos, cuestionarse.
Romeva ha animado a los participantes a afrontar de forma clara la memoria histórica,"sin prejuicios ni limitaciones para desinstitucionalizar la desmemoria", algo que cree que debería haberse hecho hace tiempo y que se ha propuesto hacer cuanto antes, para no perder a más testigos directos.
"Hay que acabar con la amnesia colectiva, con la amnesia histórica, que lo que hace es construir falsas realidades", ha dicho, porque considera que en algunos casos se ha tergiversado la realidad, especialmente en el periodo que inicia el levantamiento franquista.
Raül Romeva ha hecho hincapié en la necesidad de este tipo de reflexiones sobre la dictadura porque "algunas voces han intentado imponerse en el relato".
MUCHOS EXILIADOS "COMO SUCEDE AHORA"
En especial --ha aclarado-- cuando se cumplen 80 años del levantamiento en un momento "singular del país, de reflexiones constituyentes, de la voluntad de construir una realidad nueva, que no puede ir separada de la realidad de los últimos años".
Pese a la importancia y afectación histórica e institucional que tuvo el franquismo, Romeva ha destacado la incidencia que tuvo en las personas porque, en muchos casos, truncó sus trayectorias vitales.
Romeva ha recordado que el estudio de lo que sucedido desde 1936 debe permitir a la sociedad ver la similitud con guerras internacionales actuales: "Mucha gente se exilió como sucede ahora cuando huyen de las guerras. No hay que olvidarlo nunca. Las situaciones personales son dramáticas las viva quien las viva".
