Concentración de funcionarios de prisiones ante la cárcel de Brians 2 (Barcelona) el 9 de diciembre de 2021. - @UGTPRESONS
BARCELONA, 9 Dic. (EUROPA PRESS) -
Sindicatos de prisiones han protestado este jueves por la mañana ante la cárcel de Brians 2, en Sant Esteve Sesrovires (Barcelona), después de que el domingo un preso empujó y dejó inconsciente a un funcionario.
Entre los convocantes están los sindicatos Csif, CC.OO. y UGT, que en un tuit recogido por Europa Press ha cifrado la participación en la protesta en más de 600 personas y ha reclamado responsabilidades a la Conselleria de Justicia ante las "continuas agresiones que sufre el colectivo".
Por su parte, un comunicado del Csif ha reprochado que "en los últimos meses están viviendo episodios muy graves de violencia" contra los funcionarios de prisiones, creen que están desatendidos por la administración penitenciaria y han tachado de laxas las normas en los centros.
El domingo, un preso empujó al jefe de la unidad del servicio interior de Brians 2: el trabajador cayó al suelo, se golpeó la cabeza y quedó inconsciente, por lo que fue trasladado en helicóptero al Hospital de Bellvitge.
Ante la situación, otros funcionarios se acercaron pero el preso cogió una botella de gel hidroalcohólico, roció a los trabajadores y sacó un mechero, tras lo que fue reducido, llevado a aislamiento y después trasladado de cárcel, según detalló la Conselleria de Justicia.
El preso estaba clasificado en segundo grado y cumple dos condenas por conducción bajo los efectos del alcohol y las drogas y tres por conducir sin carné, sumando en total una pena de 26 meses y medio, y al día siguiente de la agresión la Conselleria anunció que se personará como acusación particular en la causa contra el preso.
PROTOCOLO DE CONTENCIONES
Tres días antes de la agresión, el jueves de la semana pasada, la consellera de Justicia, Lourdes Ciuró, había reiterado su intención de revisar la normativa que desde marzo limita las contenciones a presos al considerar que "no es operativa".
La circular que limita las contenciones mecánicas a los presos está en vigor desde poco antes de terminarse la legislatura anterior y ha recibido constantes críticas de los sindicatos de funcionarios de prisiones.
En cambio, entidades de derechos humanos han advertido que modificar esta norma que limita las contenciones podría suponer una regresión de derechos, y ante estas críticas Ciuró defendió el compromiso de su departamento con los derechos humanos y sostuvo que "de puertas hacia fuera es una circular que se ve bien, pero de puertas adentro nadie se la cree, por lo tanto no es operativa".
El equipo actual de la Conselleria trabaja en una nueva normativa, con la intención de que entre en vigor el 1 de enero de 2022 y con la voluntad de que sea "participada" de los representantes de los trabajadores, según apuntó Ciuró.