Vergés destaca su labor para alcanzar una "solución democrática" en el País Vasco
BARCELONA, 21 Sep. (EUROPA PRESS) -
Una veintena de entidades de la sociedad civil de Euskadi han recibido este miércoles el Premi ICIP Construcció de Pau por su contribución a la paz y a la defensa de los derechos humanos en el País Vasco, en un acto en el Parlament con representantes de las organizaciones premiadas.
El premio, otorgado por el Institut Català Internacional per la Pau (ICIP), reconoce su "contribución al avance de la paz, al final de la violencia política y a la creación de nuevos marcos de convivencia y reconciliación", y se ha otorgado a propuesta de la entidad catalana Fundipau en el décimo aniversario del anuncio del fin de ETA.
Entre los premiados están el Foro Social Permanente; la Coordinadora Gesto por la Paz y Elkarri/Lokarri --ya disueltas--; Foro de Asociaciones de Educación en Derechos Humanos y por la Paz; Gernika Gogoratuz, y las iniciativas Encuentros Ciudadanos-Memoria Lab y los Encuentros restaurativos de presos de ETA con víctimas.
En un discurso durante el acto, la vicepresidenta del Parlament en funciones de presidenta, Alba Vergés, ha destacado que los premiados supieron trabajar "para dar una solución democrática a lo que se vivía en el país" desde distintas visiones.
"Y sin hacer ninguna analogía, y cinco años después de que la sociedad catalana desde este septiembre de 2017 y octubre de 2017 mostrara esta vía como la imprescindible para defender la democracia y los derechos de las personas a decidir su futuro, y también que la represión pasara a formar parte de nuestras vidas y sociedad, debemos saber lo que compartimos", ha dicho.
MARÍA OIANGUREN Y ENEKO CALLE
En nombre de los premiados, la directora de Gernika Gogorautz, María Oianguren, ha agradecido el premio y el reconocimiento que supone a las iniciativas por la paz en Euskadi, y ha subrayado que Catalunya "ha acompañado el proceso de construcción de paz del País Vasco en los años más difíciles", también desde el Parlament.
Sin embargo, ha llamado a seguir trabajando: "Queremos también recordar que la cultura de la violencia y el belicismo siguen siendo la forma de relación hegemónica de resolver los conflictos. La desigualdad, pobreza, migración y cambio climático no se resuelven con mayor militarización".
Por su parte, el portavoz de Foro Social Permanente, Eneko Calle, ha lamentado que "ser pacifista no fue fácil en Euskalerria" y ha celebrado que, pese a ello, hubo personas que se unieron para facilitar diálogo y abrir escenarios de paz.
También ha alertado de que "aun no ha terminado el proceso de paz en el País Vasco", y ha llamado a revisar el pasado deforma crítica, trabajar en la memoria, abordar la situación de los presos y reconocer a todas las víctimas.
Por su parte, el presidente del ICIP, Xavier Masllorens, ha reivindicado el trabajo discreto y paso a paso de las entidades, en sus palabras, y su compromiso por el diálogo desde una mirada crítica con las injusticias: "La violencia de las armas y la represión ha dado paso a una batalla por el relato donde se combinan el necesaria llamamiento ética a la condena de todas las formas de violencia como garantía de no repetición con la lamentable lucha partidista".
Además de Vergés, al acto ha asistido la presidenta del Parlament suspendida, Laura Borràs; la secretaria segunda de la Mesa, Aurora Madaula, y el secretario tercero, Carles Riera, junto a otros diputados de la Cámara catalana.
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