MADRID, 7 Abr. (CHANCE) -
Se ha convertido en el evento más esperado de la semana. Este viernes Marta Riesco celebra en un céntrico restaurante de la capital su 35 cumpleaños y el éxito arrollador que ha tenido su single 'No tengas miedo'. Una fiesta en la que la reportera ha cuidado hasta el más mínimo detalle en la que se supone que se producirá su primer posado 'oficial' con Antonio David Flores, después de varios meses 'jugando al gato y al ratón' e intentando mantener su amor lejos del foco mediático.
Pero, mientras cuenta las horas para su 'presentación en sociedad' con Marta, el excolaborador continúa en Málaga, volcado en su familia y residiendo bajo el mismo techo que Olga Moreno. Algo cuanto menos llamativo, ya que todos pensábamos que Antonio David se había alquilado un apartamento en la ciudad andaluza cuando se consolidó su relación con la ahora cantante y cesaron las especulaciones acerca de una reconciliación con su exmujer.
Así, hemos visto al padre de Rocío Flores saliendo del domicilio familiar en moto sin hacer declaraciones sobre las últimas polémicas que han sacudido a su familia, como la presunta infidelidad de Manuel Bedmar a su hija con una joven llamada Laura Gutiérrez.
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Poco después, y demostrando que cuando no está en Madrid disfrutando de su amor con Marta Riesco, está completamente volcado en sus hijos, ha ejercido de papá recogiendo a la pequeña Lola, de 8 años, en el colegio. Intentando pasar desapercibido con gorra y mascarilla, Antonio David dio un tranquilo paseo con la niña, con la que presumió de complicidad y con la que no dejó de charlar sobre cómo había ido el día.
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