PALMA DE MALLORCA 25 Abr. (EUROPA PRESS) -
La celebración de la Misa de Pascua a la que anualmente asiste la Familia Real ha estado marcada por la ausencia del Rey, quien ha permanecido en el Palacio de la Zarzuela realizando trabajo de despacho. Ante esta situación, las hijas de los Príncipes de Asturias han acaparado todo el protagonismo del evento.
La Reina, Don Felipe y Doña Letizia acompañados de las infantas Leonor, Sofía, Cristina y Elena llegaron a media mañana a la Catedral de Mallorca para asistir a la tradicional Misa de Pascua, como cada Domingo de Resurrección.
Como manda la tradición, la ceremonia religiosa marca el final de las vacaciones de Semana Santa de los miembros de la Familia Real en el Palacio de Marivent, en Palma. Para tal ocasión, la Reina Sofía eligió un primaveral traje de chaqueta y falda recta en color azul marino y estampado floral.
Mientras tanto, la infanta Cristina se decantó por un llamativo vestido rojo a la vez que Elena y Letizia coincidían en su elección de pantalones oscuros. La infanta los combinó con una elegante americana y la Princesa de Asturias se decantó por una blusa de flores y una chaqueta de ante marrón.
Pero, sin duda, las grandes protagonistas del evento fueron Leonor y Sofía, quienes esta vez no iban igual vestidas, aunque sí muy parecidas, ambas con atuendos de flores en tonos rosas y verdes con chaquetas de punto a juego.
Este año, lo más impactante ha sido la ausencia del Rey Don Juan Carlos, quien se encontraba en el Palacio de la Zarzuela realizando trabajo de despacho para organizar la visita oficial a España que realizan este lunes y hasta el miércoles el Emir del Estado de Catar y su esposa.