Marta Sánchez: "Paula nos sigue pidiendo un hermanito"

Marta Sánchez y su marido Jesús
Josefina Blanco
Actualizado: lunes, 7 diciembre 2009 13:36

MADRID, 7 Dic. (Por Gloria Vázquez) -

Marta y Jesús tras 8 años juntos y una hija en común, Paula, se presentan como un matrimonio feliz y amantes del café. Han descubierto que con Tassimo todos los gustos tienen cabida, desde el chocolate de Paula hasta el duro despertar de unos padres que se levantan tan adormilados que deben dejar un tiempo para poder mirarse a los ojos y darse los buenos días.

Marta sacará nuevo disco en unos meses, no obstante, confiesa no encontrarse preparada para ello porque ha estado trabajando muy duramente y no ha tenido casi tiempo para nada. Por eso le advierte a su marido que se escapará una semanita antes del lanzamiento a perderse por alguna de sus dos ciudades más in: Londres o Nueva York. Donde en la más pura soledad, podrá reencontrarse a sí misma, desconectar, reflexionar e irse de compras sin que Jesús le meta prisa.

La moda una de las grandes aficiones de la cantante ha sido heredada por la pequeña al igual que la rebeldía por parte del padre.

- ¿Sois muy cafeteros?

- Jesús. Muchísimo.

- Marta: Me encanta el café, de hecho hemos jubilado otra muy conocida porque esta nos ha conquistado.

- ¿Esta tiene más variedad?

- Jesús: Mi hija lo va a agradecer, sobre todo por la opción del chocolate milka y sinceramente yo también.

- ¿Cómo es vuestra mañana, cómo os despertáis?

- Jesús: Nosotros tenemos esos 5 minutos de levantarse cada uno hacia un lado de la cama sin ni siquiera mirarnos. Cuando ya cada uno ha salido del baño ya es 'hola cariño, buenos días'. Hay cinco minutos críticos, llamémoslos de paz.

- ¿Tenéis el mismo horario?

- Marta: No, depende de lo que hayamos hecho el día anterior. Si yo he tenido un compromiso de televisión hasta tarde, obviamente no me levanto a las ocho menos cuarto como todos los días. Normalmente solemos hacerlo porque nos gusta llevar a la niña al colegio, nos turnamos los días. A Paula le encanta que la llevemos al colegio.

- ¿Quién es más detallista a la hora de preparar el desayuno?

- Marta: Hay una chica que por la mañana pone la mesa, y yo soy la encargada de hacer el café y las tostadas.

- ¿Quién preparó el primer desayuno romántico?

- Jesús: Seguro que alguna señorita encantadora en un hotel maravilloso.

- Me refiero a sorprender al otro.

- Marta: Yo soy más detallista en esas cosas.

- ¿Es un punto negativo para Jesús?

- Marta: No, porque él lo es en otras cosas.

- Jesús: Yo de la cocina hacia dentro no me veo. No es mi territorio, no me siento cómodo. (risas)

- Se acercan las Navidades ¿Cómo lo vais a celebrar?

- Marta: Prácticamente se lo dedicamos en su mayoría a Paula, no sólo material sino espiritualmente también. Para mí el sentido de la época navideña es únicamente por mi hija porque si no yo ya hubiera descartado lo de las Navidades por las carencias familiares que tengo.

- ¿Habéis creado vuestra propia familia y tenéis que crearle ambiente para ella?

- Marta: Sí, queremos que disfrute de esta época. También es una forma de darle una recompensa si se ha portado bien o un castigo si se ha portado mal.

- ¿Cómo se ha portado, tendrá carbón o regalito?

- Marta: Es una niña de fondo muy bueno, de espíritu fantástico pero tiene un lado muy caprichoso.

- Jesús: Y un lado rebelde, que lo ha sacado de su padre.

- ¿Y el caprichoso de dónde lo ha sacado?

- Marta: Es una niña muy mimada.

- Jesús: Tan sencillo como que es hija única, su mamá es quién es. Como casi todos los hijos únicos de una sociedad acomodada en la que vivimos.

- Marta: Tiene una serie de cosas desde que nació que ni Jesús ni yo hemos tenido y nos choca. Porque nosotros no hemos tenido ni vivido de esa manera.

- ¿Os sigue pidiendo un hermanito?

- Marta: De vez en cuando.

- ¿Pero se pondría celosísima dejaría de ser la reina de la casa?

- Marta: Seguro. Sería tremenda. Luego lo adoraría pero habría una etapa de celos impresionante.

- Jesús: Ella no sabe muy bien que dice con lo de los hermanitos.

- ¿Lo habéis descartado?

- Marta: No del todo, pero quizá estamos menos concienciados a esa posibilidad que hace un año. Estuvimos intentándolo un montón, estábamos convencidos de ello, pero no ocurrió.

- ¿Qué haces para mantener la línea, Marta?

- Me cuido un poquito. Voy mínimo dos veces en semana al gimnasio, aunque me cuesta la vida, a veces, porque las clases que hago con mi profesor comienzan muy temprano, a las nueve y media de la mañana.

- ¿Qué tipo de ejercicios?

- Interball, Aeroboxing y entrenamientos personales.

- Merece la pena por los resultados.

- También me ha dado una disciplina muy buena para mi físico y para mi mente. No puedo vivir sin mi gimnasio. Estuve hace una semana sin poder ir por motivos laborales y estaba de muy mal humos. Si que se me notó en el desayuno. (risas)

- ¿Paula es muy presumida, al ver que tú te cuidas tanto?

- Sí. Es muy presumida, al igual que tiene ese lado de presunción con las ropas, los tacones y los maquillajes luego tiene un lado más masculino con los juguetes. Le gustan mucho más los camiones que las muñecas.

- ¿Escucha tu música?

- No, pasa de todo. A veces cuando por la noche le pongo la radio para dormir y suena alguna canción mía viene corriendo a decirme que estoy en la radio, pero nada más.

- ¿Nuevos proyectos Marta?

- Estoy terminando el disco que saldrá entre febrero y marzo.

- ¿Estas agobiada?

- No estoy muy fresca para lanzarme a ello, porque mi preámbulo ha estado marcado por una promoción por muchos motivos y me va a costar porque es super duro. Una semana antes de sacar el nuevo trabajo me escaparé y me perderé.

- ¿Dónde te gustaría perderte?

- Seguramente en Londres o Nueva York.

- ¿High Park o Central Park? ¿Soho o Tribeca?

- A todo lo que pudiera. Pero de Nueva York me gusta todo.

- ¿Con quién te irías?

- Sola y cuando digo sola es sola.

- ¿Toda una semana?

- Con cuatro días me basta.

- ¿Cómo es un día de compras de Marta Sánchez?

- Marta: A menuda has ido a preguntar. Jesús no puede conmigo cuando vamos de compras, le parece insoportable. Él no concibe ni tener que pedir otra talla de un pantalón en un probador, tiene que ser a la primera. No me acompaña, ni quiero que me acompañe. Lo que he comprado con él siempre lo he comprado mal. Nos repartimos el tiempo.

- Jesús: Para Marta comprar es parte de su trabajo. Es casi una actividad laboral más.

- ¿Tú no eres presumido?

- Marta: sí que lo es.

- Jesús: supongo que si lo soy. Pero en el caso de mi mujer es que tiene una connotación laboral, es un tema serio.

- Marta: Lo que sucede es que él considera que son demasiadas ocasiones para su entender.

- Jesús: Yo no concibo que algo que puede ser una actividad de disfrute se acabe convirtiendo en una obligación. Muchas veces va preocupada porque no sabe si va a encontrar algo que le guste.

- ¿Es que la ropa esta temporada es muy fea?

- Marta: Sí, hay cosas feísimas.

- Jesús. Ahora entiendo que se tenga que ir de tiendas a Londres o Nueva York.

- ¿Eres muy crítico con la ropa de Marta?

- Marta: No le gusta que me ponga lentejuelas, y a mí me encantan.

- Jesús. Yo tengo que reconocer que cuando más me gusta mi mujer es cuando va en vaqueros.

- ¿Siempre decís lo mismo?

- Sí, pero con su tacón, maquillada...

- ¿Y con la típica camiseta blanca que sólo le sienta bien Kate Moss?

- Marta: Pero Kate Moss no le gusta a los tíos porque está plana como una tabla, sólo nos gusta nosotras.

- ¿Tu ideal es una marta mucho más casual?

- Jesús: Sí, estoy muy acostumbrado a verla muy arreglada. Cuando la veo más fresquita, creo que le rejuvenece el look. Ella sabe muchísimo de moda, yo trabajo con muchísimos estilistas y ella sabe mucho más de moda que ellos.

- ¿Si abandonase la carrera se podría dedicar perfectamente a esto?

- Yo digo una cosa, ahora que no me oye, mi mujer es 'una estilista que canta como los ángeles'. A ella lo que le gusta de verdad es la moda.

- ¿Y por qué no se lanza a ello?

- Igual algún día sorprende.