To be or not to be a Naïve person, that is the question

Socks
Europa Press
Actualizado: jueves, 26 noviembre 2009 12:03

Por Gloria Vázquez Sacristán

Vivimos una era camaleónica, ecléctica, urbana y cosmopolita. Somos hechiceros de la moda, brujos de lo eterno y curanderos de los "must have it".

Aunamos la cultura de nuestros padres, herederos de una transición que no hemos vivido, sino que hemos oído en forma de cuentos y de monumentos decapitados, mientras el ritmo de algunos románticos suenan aún... Los jóvenes eregimos nuevos imperios al ritmo de las temporadas en Zara.

Nos movemos eclipsados por los detellos de unas blackberrys que nos condenan al tiempo que nos liberan. Cuando tratamos de sortear toda esta enslada mental, que diría una amiga brasileña afincada en Roma, nos encontramos con pequeños tesoros dignos de retratar, de contar y de enmarcar.

Dinámicos, rockeros, urbanitas, posh, alternativos, british, etc. Podría enumerar todas aquellas tendencias urbanas que se esconden tras los trajes de chaqueta, los vaqueros, las americanas vintage, los vestidos retro y los míticos pantalones pitillo. Los calcetines naïve son como una camelia de Chanel, como un Kelly de Hermés o como una pluma Montblanc. Un básico de nuestros días, pero con la diferencia de que están al alcance de nuestros zapatos, bien sean unos Manolos o unas bailarinas.

Hombres y mujeres unidos por los pies, ¿es acaso el mundo al revés?

No, queridos, es el siglo XXI. Compartimos la moda, los puestos de trabajo y me atrevería a decir muchas más cosas que desmitificaría el futuro de nuestra generación.

No obstante, porque esta empresa, este concepto, nace de una mente joven me hace creer ya no sólo en su ingenio sino en su futuro.

Calidad, exclusividad, magia, estilo, colorido y sobre todo mucha clase son los ingredientes de esta firma en la que la materia prima, - la calidad de sus materiales, algodón 100%- , se fusiona con la genialidad de quienes creen que la sociedad puede cambiar con unos calcetines rojos. Para todos aquellos incrédulos sólo os diré que la colección abarca todo tipo de prendas de las que daré cuenta en posteriores publicaciones.

Hoy me centro en la bandera de la firma, el must de la casa, y ellos son sus calcetines unisex, listos para un mundo donde hombres y mujeres se levantan a la misma hora, pisan con la misma fuerza las aceras del mundo y sobre todo visten sus pies de igual manera.

Si no estás preparado para la revolución Naïve te recomiendo que te quedes en casa con una película en blanco en negro, un walkman y tus calcetines monocromos porque "caro mio" este siglo no está hecho para ti.

Pisa el acelerador con unos naïve y verás como la perspectiva cambiará y nunca más tendrás que echar la vista atrás.