MADRID, 4 May. (CHANCE) - Todos los miembros del personal de la familia real británica han sido llamados en plena madrugada para una reunión de emergencia en el Palacio de Buckingham. El objetivo era llevar a cabo un anuncio relacionado con la monarca, Isabel II, o su marido, el duque de Edimburgo. Un hecho fuera de lo habitual que ha puesto en alerta a todas las redacciones del país. Sirvientes de todas las residencias reales del país han sido ordenados a Londres y serán dirigidos esta mañana por Lord Chamberlain, el oficial más alto de la Casa Real, así como por la mano derecha de la reina, el secretario privado Sir Christopher Geidt. El personal de Windsor Castle y Sandringham también fue alertado, así como el de residencias más alejadas, como Balmoral en Escocia. La reina, que cumplió el mes pasado 91 años, acababa de regresar a la capital después de una prolongada escapada de Semana Santa en Windsor junto al príncipe Felipe, que el próximo mes de junio alcanzará los 96 años. A pesar de que una fuente destacada aseguraba a la agencia Reuters que no hay había motivo de alarma en la reunión de la casa real británica, muchos eran los rumores sobre cuál sería la razón que habría provocado todo este movimiento de madrugada. Sobre las once de la mañana, el palacio de Buckingham nos sacaba de dudas, y anunciaba la retirada del príncipe Felipe de la vida pública a partir de este próximo otoño. El duque de Edimburgo ha contado en todo momento con el apoyo de la Reina que seguirá manteniendo su cargo y su programa de actos como monárquica británica.