MADRID, 3 Mar. (Por Irene Díaz) -
Jaime Olías ha debutado en televisión como Damián, el chico atractivo y misterioso que protagoniza 'Ángel o demonio', la nueva serie de Cuatro y la primera del género fantasía que se rueda en España. Se trata de la historia de Valeria Gascón, una joven convertida por sorpresa en Ángel que deberá proteger las almas de los mortales que los demonios quieren arrebatarle.
El joven tiene 21 años, está estudiando Comunicación Audiovisual y como fan de las series fantásticas americanas está encantado de poder trabajar en este nuevo e innovador proyecto de los creadores de 'Hay alguien ahí'.
- ¿Qué papel le corresponde a Damián en 'Ángel o demonio'?
- Mi personaje es el conflicto en persona, se debate entre el lado bueno y el malo, lo que quiere hacer y lo que debe. Compañero de clase de Valeria, anhela convertirse en su novio pero para eso lo correcto no es el camino fácil y lo sufre. Es un personaje tan gris como cualquier ser humano, eso el lo mejor de él.
- ¿Por qué crees que gustará esta serie?
- Porque es unan gran apuesta, jamás pensé que me darían un primer papel en un proyecto así de cuidado, tan innovador y tan trabajado. El público más exigente va a agradecer que se haga una serie como esta. No es una trama banal ni chabacana, va a cultivar y a enganchar. Como adicto a las series americanas estoy gratamente sorprendido con 'Ángel o demonio', estoy convencido de que va a enganchar
- Tiene que dar vértigo debutar en algo así...
- Mucho, sobre todo al principio, ahora ya me manejo como pez en el agua porque me han tratado muy bien y me están enseñando mucho pero al principio fue duro. Ahora estoy muy contento y solo quiero rodar y rodar y que esto nunca se acabe.
- ¿La compararías con alguna serie americana?
- Con ninguna en concreto, está dentro del género fantástico, algo que ahora está muy de moda, pero también es una trama muy humana, no son personajes planos, todos ellos tienen tremendos conflictos internos.
- ¿Qué te ha costado más a la hora de interpretar este papel?
- Las escenas de cama me daban miedo pero el equipo me ha tratado muy bien y todo ha ido sobre ruedas, me creía una persona pudorosa pero no lo soy.
- ¿Desde cuando te atrae la interpretación?
- Hice unos cursos de interpretación en una escuela pero finalmente decidí estudiar la carrera de Comunicación Audiovisual porque me gusta mucho el cine. Estoy en tercero de carrera y por ahora lo compagino sin problemas, se están portando muy bien conmigo en ese sentido, siempre que necesito un día libre me lo dan.
- ¿Qué te dicen en casa de esto?
- Me animan todos un montón, están muy contentos. Mi madre, que es una tremenda luchadora, es la que siempre me ha animado a ir en busca de lo que quiero. Tengo un hermano gemelo pero no nos parecemos, él es más guapo que yo.
- ¿Estás preparado para verte en las carpetas de las niñas?
- No, ni si quiera me lo planteo, yo lo que quiero es seguir trabajando en esto.
- ¿Cómo te defines?
- Al igual que el personaje soy gris, estoy lleno de matices. No soy tímido pero sí introvertido, no sabría qué virtud destacar, lo que soy es maniático y muy perfeccionista.
- ¿Más ángel o más demonio?
- Intento tirar más a ángel pero soy una mezcla de ambos.
- ¿Recuerdas alguna anécdota del rodaje?
- Muchas, la más graciosa fue el primer día, llegué sin saber nada y la primera escena que me pusieron a rodar fue una escena de cama, pensé que me moría pero finalmente me dejé llevar y todo salió bien.
- ¿Qué tal está siendo trabajar con Aura?
- Genial, nos conocíamos desde pequeños, los dos somos de Torrelodones y ha sido una gran casualidad volvernos a encontrar aquí. Me está ayudando mucho, es mi mentora.
