Los aerosoles de origen humano influyen en el reparto de la lluvia

Atmósfera
NASA
Actualizado: viernes, 22 enero 2016 19:25

   MADRID, 22 Ene. (EUROPA PRESS) -

   Científicos han demostrado que los aerosoles artificiales pueden desempeñar una fuerte influencia en la configuración de la distribución de la lluvia y las nevadas en todo el mundo.

   Según un nuevo estudio del MIT (Instituto Tecnológico de Massachusetts) en Geophysical Research Letters, los efectos de los aerosoles antropogénicos ejercen una fuerte influencia en la determinación de dónde tendrá lugar un aumento o una disminución de la precipitación en todo el mundo.

   Ejecutando simulaciones históricas con los modelos que representan las interacciones de aerosoles en la nubes con mucha más precisión que en los análisis anteriores, el estudio del MIT indica que la distribución de las precipitaciones en la segunda mitad del siglo 20 está dominada por los efectos de los aerosoles antropogénicos en los trópicos, y también influyó sustancialmente en regiones no tropicales del hemisferio norte.

   "Si bien es cierto que el cambio total de la precipitación es controlado por el cambio de la temperatura global promedio, lo que, a su vez, se basa en gran medida en las emisiones de gases de efecto invernadero, nuestra investigación muestra que los aerosoles han impactado significativamente en la distribución de los cambios en las precipitaciones en todo el mundo desde la época preindustrial, "dice Chien Wang, científico investigador senior en el Programa Conjunto del MIT sobre la Ciencia y Política del Cambio Global

   Usando simulaciones históricas de 1850 a 2005, el estudio del MIT comparó los resultados de un conjunto de 10 modelos recientes del Coupled Model Intercomparison Project Phase 5 (CMIP5), que representan explícitamente las interacciones de aerosoles en la nube, con los de un conjunto de siete modelos más antiguos que sobresimplifican estas interacciones. Los nuevos modelos mostraron que los cambios de precipitación impulsados por aerosoles ocurrieron no sólo en las concentraciones altas (por ejemplo, la región india durante el monzón de verano), sino también en una serie de lejanos lugares.