Los beneficios que logra un coach de equipos convierten a este en una pieza fundamental para todo tipo de empresas.
Madrid, a 27 de octubre de 2017.- Desde hace algunos años, las técnicas empleadas por los entrenadores deportivos para estimular y mejorar el rendimiento de sus jugadores se emplean en el mundo laboral. A pesar de todo, hay quien duda de que estas sean efectivas a la hora de aplicarlas en la empresa. Sin embargo, los resultados indican todo lo contrario, ya que la labor de un coach de equipos puede aumentar tanto la productividad como el grado de satisfacción de todos los que lo forman.
¿Qué es un coach de equipos?
El coaching es un método de cohesión, en el una persona ejerce como entrenador y el resto se deja llevar por este para conseguir el mayor potencial posible. Para ello, es importante tener una sesión previa, en la que se pueda conocer al menos en parte cuáles son los puntos fuertes de cada uno, así como el modo de unirlos a los de los demás.
A diferencia de lo que algunos piensan, un coach no es ningún gurú de la motivación ni nada por el estilo. Tampoco es un psicólogo, aunque algunos profesionales del coaching en Madrid tienen formación en esta materia. Aún así, cuando hablamos de un coach no nos referimos a este tipo de profesionales, sino a quien se encarga de poner a todo el mundo frente al espejo para conocerse y saber cómo sacar el máximo de cada uno.
Las responsabilidades de un coach de equipos
Un coach se encargará de hacer que todo el mundo se cuestione sus propios límites, que se dé cuenta de que estos no son más que barreras que cada quien se ha impuesto pero que no son reales. Una vez que este techo se rompe, es el momento de encontrar el modo de ampliar al máximo todos los talentos de cada uno. Además de mejorar en aquellos aspectos en los que sea necesario.
Un coach hará que el equipo tenga una actitud positiva y trabaje en una misma dirección, aportando cada uno de los miembros aquellas virtudes que suplan las carencias de otros.
El coach de equipos define metas
Algunas veces, las condiciones de un trabajo exigen algo que puede parecer demasiado. Un coach ayudará a los miembros del equipo a definir cuáles son los aspectos importantes y comenzar por ellos. Una vez que se ve de este modo y se empieza a trabajar, el resto se vuelve más sencillo y alcanzable.
Para hacerlo, en lugar de que todo se vea como una sola labor, muestra el modo de dividirla en metas consecutivas, las cuales se convierten en escalones hasta el objetivo final. Ahí es donde entran en juego las fortalezas de cada uno, para que en caso de que alguien se quede atascado sus compañeros puedan cogerlo de la mano y ayudarle a subir.
Autoconocimiento del grupo
El coach de equipos se encargará de que todo el mundo se vea como debe, y no como tal vez lo haga en estos momentos. Desarrollando de forma conjunta el potencial, se aprende de verdad a definir el modo en el que funciona cada uno como parte integral del grupo. Este sentimiento de pertenencia aumenta la confianza y permite mejorar los resultados a corto y largo plazo.
Definir el liderazgo
Uno de los principales impedimentos de que un equipo de trabajo no sea productivo es la falta de liderazgo. Hay quien confunde ser un líder con exigir que todo el mundo haga las cosas del modo en que este las ve, aunque en realidad esta no es la palabra que define un personaje de este tipo.
Ser un líder no supone tiranizar a nadie, sino tomar las riendas cuando sea necesario y cederlas a otros cuando estos demuestren que están en mejores condiciones de ir delante. El auténtico líder colabora y motiva como el que más, además de impulsar al resto a que haga lo mismo en determinados momentos.
Un coach de equipos ayudará a identificar quién está mejor preparado para ser el encargado de encabezar el proyecto, aunque no tomará una decisión, sino que permitirá que el resto del grupo vea en esta figura lo mismo que él. Para ello, fomenta la comunicación entre iguales y la aceptación de que hay diferentes formas de hacer algo sin que ello suponga un cambio en el objetivo final.
El coaching mejora el ambiente en el trabajo
Uno de los puntos más valiosos del coaching de equipos en Madrid es que las relaciones se tornan más positivas. La empatía entre los miembros del equipo fortalece el conjunto y crea un mejor ambiente de trabajo.
Esto repercute de forma muy notable en varios aspectos de la empresa. Para empezar, los trabajadores se sienten más cómodos en su puesto, con lo cual rinden mucho más que cuando el ambiente laboral no es agradable. De hecho, se calcula que más de la mitad de los trabajadores que participan en eventos de coaching se sienten más felices.
Esta situación influye claramente en la competitividad de una empresa. La productividad del equipo, así como la mayor implicación en cada uno de los proyectos en los que participan hacen que este sistema sea en la actualidad uno de los más recomendables a este nivel.
¿Qué empresas pueden beneficiarse de la labor de un coach?
En realidad, no hay actividad empresarial que no encaje con el trabajo que puede hacer un coach. Incluso quienes no forman parte de un equipo, sino que tienen un trabajo individual, pueden mejorar su productividad y ver las cosas desde un punto de vista distinto, que les ayude a lograr un mayor grado de eficacia.
Sea como miembro único de un equipo o como parte de algo más numeroso, todo lo que puede enseñar este experto ayudará tanto a nivel particular como en grupo a lograr mejoras muy significativas. Quienes aún se resisten a reconocerlo terminarán quedándose atrás. Algo que no te puedes permitir si tienes una empresa del tipo que sea.
Empresa: OlimpoMarketing
Autor: Pedro Fernández