El consejero delegado de TCV asegura que las mejoras en el puerto "no son suficientes" porque su éxito lo convierte en "enemigo a batir"
VALENCIA, 4 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Generalitat, Francisco Camps, afirmó hoy que los puertos de la Comunitat Valenciana permiten decir "claramente" que la autonomía es el "cruce de caminos fundamental entre continentes y países", por lo que "todo aquel que se ubica en donde se hacen los intercambios tiene capacidad de generar riqueza y de añadirle valor a todo aquello que se hace o se propone en el lugar donde se hace el intercambio de caminos".
Camps hizo estas declaraciones durante la inauguración de las nuevas instalaciones de la empresa logística TCV Stevedoring Company en el Puerto de Valencia, en un acto en el que estuvo acompañado por el consejero delegado de la compañía, Ángel Pérez; el presidente de la Autoridad Portuaria de Valencia (APV), Rafael Aznar; el conseller de Infraestructuras y Transporte, Mario Flores, y varios representantes empresariales.
La ampliación de la empresa en el puerto de Valencia, para lo que la compañía invertirá un total de 69 millones de euros, y la del muelle de Llovera --a la que la APV destinará 40 millones-- permite a TCV ampliar su capacidad en el mercado, duplicando la capacidad de su terminal, al pasar de 650.000 TEUs a 1.250.000, y dotándola de las instalaciones necesarias para que puedan atracar buques de nueva generación, de 9.000 y 12.000 TEUs.
Según el presidente Camps, la Comunitat Valenciana es "líder, entre otras muchas cosas, en ese punto de intercambio, porque tiene las ideas claras, porque el horizonte es lejano, porque pretendemos seguir haciendo cosas importantes para el futuro y porque estamos demostrando que lo público y lo privado, con sentido y con responsabilidad, pueden ir juntos de la mano".
Al respecto, señaló que el hecho de planificar desde lo público, "de manera ordenada y coherente" hace de "tirón y locomotora para la inversión privada". Asimismo, aseguró que los empresarios que invierten en la Comunitat "son conscientes de que es una planificación perfectamente pergeñada, sin ideas vagas, sin abstracciones y sin teorías que no nos llevan a ninguna parte", porque "lo que quieren es invertir con tranquilidad y confianza".
Durante su intervención, Francisco Camps aseveró que "en buenos y malos momentos", la Comunitat se prepara para "seguir siendo líderes, seguir compitiendo y estar en las mejores condiciones en el momento en que vuelva otra vez a ponerse en marcha la inmensa maquinaria planetaria de generación de prosperidad, oportunidades y trabajo".
"El puerto ha sido una vocación en la Comunitat durante estos últimos años", comentó el jefe del Consell, quien añadió que las planificaciones "perfectamente bien definidas", que han hecho crecer el puerto, hacen que "seamos conscientes de que esta comunidad portuaria, cuando plantea estrategias, suma iniciativas, estamos juntos y tenemos objetivos claros, pone en marcha las iniciativas y se consigue lo que se pretende".
Así, resaltó que el puerto de Valencia ha sido "sugestivo y sugerente para la inversión privada" y que "ha sabido mantener el pulso y la tensión necesaria para que la apuesta de convertirse en el primer puerto del mediterráneo sea hoy una realidad". Por ello, aprovechó para reclamar el corredor mediterráneo, ya que se trata --dijo-- de "una apuesta territorial y regional de primer orden".
"VULNERABLES"
Para el consejero delegado de TCV, desde el puerto de Valencia, "no somos los mejores en la productividad", y --añadió-- aunque "se ha mejorado mucho, hasta que no seamos los mejores nos seguirán atacando y seguiremos teniendo un flanco débil y siendo vulnerables".
A su juicio, el puerto de Valencia vive una situación "absolutamente única en los difíciles momentos actuales", debido --indicó-- a una "política fundamental que se ha demostrado acertada", al compatibilizar terminales de varios tipos.
No obstante, matizó que el éxito cosechado convierte al puerto valenciano en "objetivo número uno, ahora que todo los demás lo están pasando mal". Por ello, insistió en que "todas las cosas buenas que se han hecho hasta ahora no son suficientes, hay que hacer muchas más" porque "somos el enemigo a batir".
Por su parte, Rafael Aznar aseguró que esta ampliación convierte a la instalación en una "terminal oceánica de primer orden" y mostró su "compromiso" con la empresa para avanzar en la internacionalización. También se refirió a la situación actual y apeló al "esfuerzo cohesionado" entre empresarios, trabajadores y autoridad portuaria.
Según dijo, la APV quiere ser "motor" en la apuesta de situar al puerto en el mercado competitivo, "todavía afectado por la crisis, de modo que no tengamos jamás un estrangulamiento de capacidad". Para ello, afirmó que deben "agudizar el ingenio y esforzarnos todavía más", con el fin de "afianzar la posición de liderazgo en el mediterráneo", donde el de Valencia es el quinto puerto de Europa.
