VALENCIA, 23 Dic. (EUROPA PRESS) -
El clásico relato de 'El Principito', de Antoine de Saint-Exupéry, llega hoy a la Casa de la Cultura de la localidad valenciana de Tavernes de la Valldigna, gracias a la adaptación teatral 'Dibuixa'm un corder!', que pone en escena el Teatre dels Navegants para los niños del municipio, según informaron fuentes de la Diputación de Valencia.
Según explicaron, esta producción, escrita y dirigida por Fabrizio Meschini, invita a los más pequeños "a no olvidar, porque, en ese caso, dejaremos de ser niños". Para ello, Teatre dels Navegants cuenta con el ex alumno de la Escuela de Teatro Escalante Jorge Sanfélix, con el actor Mario Passero y con la colaboración de la bailarina Susana Rodrigo y de la actriz Reyes Ruiz, que presta su voz a algunos personajes.
El resto del equipo artístico lo conforman el autor de la música original, Pep Llopis, el encargado de la iluminación, Luis Muñoz, el responsable del diseño y realización del vestuario, Pascual Peris, y el artista plástico autor de los dibujos y pinturas originales, Cristian Yapur.
'Dibuixa'm un corder!', comentaron, cuenta la historia de un misterioso muchacho, aparecido en los sueños de un aviador perdido en el desierto, que hace un viaje hacia mundos fantásticos, donde conocerá a sus curiosos y entrañables amigos.
Sanfélix señaló que actuar en esta obra "es una mezcla de sentimientos, un regalo", sobre todo después de estrenar la obra en el Centro Teatral Escalante que, después de seis años, "es una casa para mí". El actor lleva todo ese tiempo vinculado a esa sala, primero como alumno de la escuela y más tarde, como actor de la compañía.
Tras sus actuaciones en 'Somni d'una nit d'estiu' y 'Guaire', Sanfélix interpreta al mismísimo Principito, "un personaje tierno que recorre los planetas del universo para encontrar a su amigo de la infancia, que le ha olvidado".
'Dibuixa'm un corder!', del Teatre dels Navegants, es "un reto para la imaginación y para la conciencia", ya que pretende incentivar al joven público a preservar y alimentar los valores humanos fundamentales, como el amor hacia uno mismo y a su entorno, el redescubrimiento de la inocencia y de cual puede ser el verdadero sentido de la propia existencia.
Se trata, en palabras del director de la obra, de "una recuperación de la infancia, del niño que llevamos todos dentro, y una confrontación entre presente y pasado, entre adulto y niño", apostilló.
