Condenan cualquier tipo de violencia o agresión física o verbal y "la campaña de linchamiento" contra Hernández Motes
VALÈNCIA, 19 Oct. (EUROPA PRESS) -
Interagrupación de Fallas de València ha ratificado a su presidente, Jesús Hernández Motes, para lo que resta de legislatura después de la polémica surgida por su asistencia a la movilización convocada contra la manifestación vespertina del 9 d'Octubre, Día de la Comunitat Valenciana, en la que un grupo de extrema derecha protagonizó incidentes violentos.
Hernández Motes dio explicaciones de esta asistencia y puso su cargo en la noche de este miércoles a disposición de la entidad en la reunión celebrada en el casal de la comisión de Sagunto-Padre Urbano, con la asistencia de 21 agrupaciones. Los presidentes le ratificaron por "amplia mayoría", según ha informado la Interagrupación en un comunicado.
Al respecto, han condenado "como entidad apolítica y democrática formada exclusivamente por falleros cualquier tipo de violencia o agresión física o verbal", y han confiado en que la justicia "actúe enérgicamente sobre todo aquel que la practique". Asimismo, han condenado "la campaña de desprestigio, acoso y linchamiento sufrida por el presidente de la Interagrupación, Jesús Hernández y del Vicepresidente primero, Pedro Pons".
Asimismo, han señalado que como ya han manifestado en otras ocasiones "sigue intacta nuestra predisposición al diálogo con las instituciones y sus representantes con el fin de construir puentes siempre en beneficio de la fiesta de las fallas".
MEDIDAS DE SEGURIDAD SEMANA FALLERA
Por otra parte, han recordado que el 11 de octubre representantes de la directiva de la Interagrupación se reunieron en "un ambiente de cordialidad" con el subdelegado del Gobierno, José Vicente Herrera, para mostrarle "su inquietud ante las medidas de seguridad a adoptar durante la semana fallera que pueden afectar no solo a la ubicación de determinadas fallas, sino al desarrollo de algunas actividades de gran repercusión social".
Igualmente, se le trasladó "la preocupación existente" ante la responsabilidad que tiene que asumir el presidente de falla a la hora de organizar actos pirotécnicos para intentar, siempre dentro de la legalidad vigente, "reducir o suavizar esa responsabilidad que dificulta en muchos casos la celebración de este tipo de actividades".
"DISCULPAS A TODOS LOS FALLEROS"
Asimismo, el presidente de la Interagrupación ha transmitido este jueves en un comunicado sus "disculpas a todos los falleros" a los que representa y que "pudieron sentirse molestos por acudir como ciudadano, a título personal, y siempre, siempre, de una forma pacífica, a un acto que entendía como una afrenta a sus convicciones como valenciano y al propio Estatuto de Autonomía".
"No supe medir las consecuencias que mi presencia, dado el cargo que ostento, pudiera servir como excusa para etiquetar tanto a mí como a un colectivo tan maravilloso como es el que tengo el honor de representar", ha manifestado.
Asimismo ha expresado su "total y enérgica condena a cualquier acto violento, venga de donde venga", y en concreto a "los actos realizados contra la vicepresidenta del Consell y Fallera Mayor 2018 de la comisión Ángel del Alcázar-José Maestre, Mónica Oltra", en referencia al escrache sufrido por ésta en su domicilio este miércoles por la noche por parte de grupos de ultraderecha.
Igualmente, ha agradecido "de todo corazón" las muestras de apoyo que ha recibido tanto él mismo como también las dirigidas al vicepresidente de la Interagrupación, Pedro Pons.
"Quiero que entendáis que, a pesar de sentir vuestro apoyo, necesitaba solicitar la ratificación en el cargo que pedí anoche. Por ese apoyo mayoritario de las diferentes agrupaciones tengo que dar miles de gracias", ha proseguido, antes de trasladar "comprensión hacia quienes se abstuvieron o votaron en contra" de su ratificación. "Os entiendo, respeto y espero que aceptéis igualmente mis disculpas", ha agregado.
"PASEMOS DE PEDIR DIÁLOGO A DIALOGAR"
Hernández ha señalado que los falleros son "expertos en puentes y diálogos". Por ello, ha emplazado al alcalde, Joan Ribó; al concejal de Cultura Festiva, Pere Fuset; a los Gobiernos municipal y autonómicos y a la vecinos de la ciudad a ser "capaces de sentarse en una mesa juntos".
"Pasemos de pedir diálogo a dialogar. Hablemos sin más. Sin premisas ni condiciones. Sin líneas rojas de ningún tipo. Sin límites por el bien de la fiesta y nuestra ciudad. Empecemos de cero", ha pedido.
