VALENCIA, 31 Oct. (EUROPA PRESS) -
La asociación de residencias y servicios de atención a los mayores del sector solidario Lares CV ha denunciado este jueves que la Generalitat debe a sus centros una deuda de 13,3 millones de euros, correspondiente a las plazas concertadas de este 2013, ya que "no han cobrado absolutamente nada desde enero".
En un comunicado, informa de que ya han trasladado su petición a la secretaria autonómica de Autonomía Personal y Dependencia, Nela García, según han expuesto a los asistentes a la jornada sobre la 'Situación económico-jurídica de las plazas de atención a la dependencia del sector solidario' celebrada este jueves.
Desde Lares CV indican que no han obtenido una "respuesta clara" de García y que ésta alega que no tiene un calendario, pero que la "intención" es pagarles "a final de año". "La respuesta es casi de silencio, lo que es realmente preocupante, porque la financiación de nuestros centros vuelve a ser muy complicada", reprueban.
La asociación denuncia que la administración "ha vuelto a dejar en un segundo plano" a sus asociados y a los mayores que residen en sus centros y, en este punto, señala que "las plazas concertadas del sector solidario se han quedado fuera del plan de pago a proveedores".
El presidente de Lares CV, José Pascual Bueno, expone que no han podido entrar en este mecanismo "por un retraso en los plazos por parte de la propia aministración" y apunta que esta circunstancia "ya de partida", les "sitúa en desventaja".
COBRO "NO EQUITATIVO"
Bueno mantiene que el sector de las residencias de mayores es el que "mayor retraso" acumula en el cobro y que, de hecho, las residencias de la Comunitat son "las que más deuda acumulan" de toda España.
El presidente de Lares CV insiste en la necesidad de desarrollar "un sistema de pagos comparable a otros sectores con prestaciones similares, como son educación, sanidad, farmacias o discapacitados".
Según ha apuntado, estos colectivos cobran "a 90 o 120 días", mientras que las residencias llevan "diez meses sin cobrar", y denuncia que esto "no es equitativo". "Los mayores deben ser tratados en igualdad y con el mismo respeto que el resto", reivindica.
