CASTELLÓN, 2 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Sección Primera de la Audiencia de Castellón ha confirmado la sentencia que condena a una mujer de 35 años a una multa de 910 euros --a razón de una cuota diaria de 10 euros durante tres meses y un día-- por haber denunciado un falso robo en su bar.
En una sentencia del 6 de julio de 2010 dictada por el Juzgado de lo Penal de Vinaroz (Castellón) quedó probado que la acusada, el 21 de mayo de 2010, se personó en las dependencias de la Guardia Civil de Vinaroz donde aseguró que ese mismo día unos autores desconocidos, tras abrir la reja de entrada y forzar la puerta de acceso al bar que regentaba, le habían sustraído 1.000 euros en efectivo, dos neveras y dos molinillos.
Sin embargo, los agentes de la Guardia Civil, tras las investigaciones oportunas, comprobaron que no se había producido tal robo, pues las dos neveras, la cafetera y los dos molinilllos habían sido retirados del local, previo consentimiento de la acusada, a cuente de lo adeudado a la empresa propietaria de estos objetos.
Contra la sentencia del 6 de julio de 2010 se interpuso un recurso de apelación. No obstante, la Audiencia Provincial de Valencia lo ha desestimado, pues explica que asistieron al juicio los agentes de la Guardia Civil que elaboraron, tras visitar el local presuntamente asaltado, el informe que "desmonta la posibilidad real de que el robo denunciado se hubiera producido".
Asimismo, otro testigo aseguró haber retirado, de conformidad con la acusada, determinados objetos del local que, sin embargo, se incluyeron en la denuncia realizada. Por ello, la Audiencia considera que "es perfectamente comprensible el convencimiento del juzgador acerca de que los hechos se produjeron como relata en el factum de su sentencia".
