Tim Robbins: "La gente será capaz de coger el poder de quienes lo han tenido tradicionalmente"

Actualizado: martes, 25 agosto 2015 18:29

MADRID, 25 Ago. (EUROPA PRESS) -

   Tim Robbins lleva tiempo abrazando el humor como forma de expresión, tanto en el teatro, donde hace poco dirigió 'El sueño de una noche de verano', de Shakespeare, como en la producción televisiva. Ahora, interpreta a un cooperante en el conflicto bélico de los Balcanes en 'Un día perfecto', el nuevo filme de Fernando León de Aranoa, en el que el absurdo se convierte en el contrapeso de la tragedia.

   "La gente será capaz de coger el poder de quienes lo han tenido tradicionalmente", ha afirmado el actor este martes durante una entrevista concedida a Europa Press con motivo de su visita a Madrid para presentar este filme.

   Hasta que esto ocurra, el actor ve en la sátira "una manera tremenda de iluminar el pensamiento y de iluminar lo que los poderes prefieren esconder". "Lo esencial es encontrar el humor en este mundo de locura que vivimos", ha señalado.

   Esa locura a la que el actor se refiere se palpa en 'Un día perfecto', la historia de un grupo de cooperantes que trata de sacar un cadáver de una zona de conflicto para que el agua no quede contaminada, una misión aparentemente sencilla que se convierte en algo imposible de solucionar.

   Según ha asegurado Robbins, vio en este guion "una buena oportunidad para mostrar que hay gente en el mundo que no tiene superpoderes y que puede ayudar a la gente más débil". "Estamos acostumbrados a ver a héroes con capa y efectos especiales, pero hay gente normal y corriente que da todo para ayudar sin nada más que amor y coraje", sostiene.

   Su papel en esta trama coral, en la que aparecen también Benicio del Toro, Sergi López, Olga Kurylenko y Mélanie Thierry, es el de un personaje obsesionado con su trabajo, que refleja el carácter de aquellas personas que "no están contentas en situaciones domésticas, ya sean actores o voluntarios". "No está en su ADN encontrar la felicidad en su hogar, viendo la televisión con su familia. Hay quienes necesitan vivir rápido y con mucha intensidad", ha explicado.

   Se trata de la segunda vez que trabaja con un cineasta español, puesto que ya participó con Isabel Coixet en 'La vida secreta de las palabras'. En su opinión, ambos guiones comparten varios elementos: "Están muy bien escritos, son interesantes, únicos e imposibles de hacer en Estados Unidos".

ESPÍRITU "PUNK ROCK"

   Para elaborar su papel, Robbins se reunió con cooperantes, gente a su juicio "muy interesante, con un sentido del humor negro" de quien no se esperaba un carácter "tan humilde y reservado" como el que descubrió.

   A diferencia de la novela, 'Dejarse llover' (Suma), de Paula Farias, en la que se basa esta película, su personaje se ha construido a partir del propio espíritu de Robbins, según los deseos del director, quien le pidió que volcase aspectos de su propia personalidad. El actor ha desvelado que en cierto modo heredó una locura que sus antepasados necesitaron para lanzarse a la aventura de cruzar Estados Unidos de este a oeste para establecerse finalmente en la costa.    

   En este sentido, Fernando León de Aranoa ha señalado en declaraciones a Europa Press que la película ha aprovechado la "energía punk rock" del artista, un "alma en llamas" que entendió "muy bien" el sentido de su papel.

   El director regresa con esta cinta a su vertiente social, aunque admite que no le gusta esa etiqueta y defiende que su primer compromiso es contar historias. "Mi principal motor es la curiosidad, si pierdes eso lo tienes difícil", ha sentenciado.

   El título de esta película es "irónico", pero el director defiende que el hecho de que los cooperantes estén ahí ya es heroico. "Es muy difícil, lo es por el hecho de intentarlo, eso se puede considerar un buen día. Alguien dijo una vez que las guerras no terminan cuando llega la paz".

   Sus personajes encarnan en cierto modo "el sentido común". Tal y como recuerda, Benicio del Toro señaló durante el rodaje: "La épica no está en salvar vidas, sino en estar". "El hecho de estar ya es heroico, no todo el mundo está dispuesto a estar", añade el director.

   El cineasta ha viajado varias veces a Bosnia. Tal y como recuerda, una de ellas, en el año 1995, grabó en su memoria la sensación de "confusión" que observó, "más allá de lo obvio y del drama y de lo que se sabe que ocurre en una guerra". "Entrevistamos a muchas personas y no entendían lo que sucedía, no sabían ni en qué frente estaban".

   En el prólogo de 'Dejarse llover', Fernando León de Aranoa escribe que "la vida, la mala vida, con sus dientes de sierra, con sus muertos, sus pozos y sus guerras, ha de experimentar pronto, pese a todo, una inevitable mejoría". Según ha indicado, se siente "optimista mientras hay quien dedica su vida y empeño". "Hay que pensar que en la naturaleza humana está lo mejor y lo peor, incluso en el mismo día", agrega.