ZARAGOZA, 4 Mar. (EUROPA PRESS) -
El entrenador del Zaragoza, Manolo Jiménez, habló tras la remontada de su equipo ante el Villarreal (2-1), y afirmó que su equipo obtuvo una "victoria total" porque durante todo el partido sus jugadores lo "han buscado".
"Si el plan B no hubiera dado sus frutos y no hubiéramos transformado los goles, me hubiese gustado entrar en la rueda de prensa y que ustedes creyesen igual que mis jugadores se han dejado la piel en el campo. Se puede discutir si lo hemos hecho mejor o peor, si teníamos que haber jugado de una forma u otra, pero la actitud que ha mostrado el equipo es la que yo quiero", explicó Jiménez.
El Zaragoza remontó un partido que se le puso en contra en el minuto 15 de partido con el gol de Martinuccio. "En el primer tiempo no sé si el gol ha sido en fuera de juego pero nos han metido una obra de arte, tres paredes, que ante eso no se puede hacer nada, un golazo", afirmó el técnico.
"Si ha sido fuera de juego no lo sé, pero el equipo ha querido siempre y, en el segundo tiempo, a pesar de que los tres cambios han sido forzados, los jugadores que han salido han sido los que han transformado el partido. Esta es la imagen que quería y la actitud que teníamos que dar", afirmó el andaluz.
Con esta victoria, el equipo de Jiménez rompe la racha de dos partidos consecutivos perdiendo. "No me quejo para nada del partido que hicimos en Getafe, fue una pena que nos marcaran en el 80. Tampoco estoy disgustado por el primer tiempo que hicimos con el Rayo, o el día del Betis", expresó.
"Hoy ha sido un partido muy igualado en donde quizá el Villarreal ha tenido más presencia que nosotros y la losa del gol nos pesó mucho. Ya en el segundo tiempo nos hemos desatado, hemos jugado sin complejos, sin miedo a no ganar, y le hemos dado la vuelta al marcador en un derroche de ganas, de ilusión y de casta que es lo que espera la gente de nosotros", afirmó orgulloso el entrenador.
Además, Jiménez quiso agradecer el apoyo del público pese a la mala situación. "He visto a la Romareda pitar para defender a su equipo y animar al Zaragoza a pesar de ser los últimos. Esto lo que tenemos que provocar nosotros, no que nos lo den", dijo.
EL TÉCNICO NO SE RINDE
Para el entrenador del Zaragoza, lo importante es tener una buena actitud en el campo y que nada se le pueda reprochar a su equipo. "Yo siempre voy a estar a pie de campo con mis jugadores, últimos, perdiendo o ganando. Donde yo me tiro para ahogarme porque no me veo con fuerzas es cuando el equipo no tiene una intención de querer ganar", declaró.
"Yo lo que quiero es llegar a la rueda de prensa contento y satisfecho, orgulloso de lo que el equipo muestre. Somos lo que somos, un equipo que luchamos por la zona baja, pero hoy hemos jugado de tú a tú contra un equipo que técnicamente es muy bueno y si hubiéramos perdido diría lo mismo. No ha podido ser, un partido más que perdemos, pero el equipo lo ha intentado y eso es lo que me piden, por lo que me han contratado, y eso es lo que yo quiero dar y hasta el final", afirmó el entrenador.
Además, Jiménez explicó que había puesto "una frase en el vestuario" para motivar a sus jugadores pero que, debido al cansancio y al sentirse "muerto", no podía recordar por lo que lo explicaría "el próximo día".
Desde el inicio de la temporada, el Zaragoza está luchando por salir del descenso. "El Zaragoza empezó una andadura muy negativa desde la jornada ocho o nueve, y cada semana que ha ido pasando no sólo nos hemos mantenido en la misma posición, sino que hemos ido a peor. Cada vez nos veíamos más lejos de la salvación porque los rivales iban ganando y nosotros éramos incapaces, y eso pesaba en los jugadores como una losa, un yugo, algo que era imposible de tirar de él", explicó Jiménez.
"Los jugadores se están convenciendo ahora de que este mal no viene de la derrota del Málaga o la sufrida ante el Betis, que viene de muchos partidos atrás y que teníamos que perder el miedo a defender. Debemos aprender a dar la cara partido a partido por nuestra camiseta, afición, y por nosotros mismos. Espero que en San Sebastián ojalá ganemos pero si perdemos lo haremos con la cara alta y sin tener nada que reprocharnos dentro del vestuario", afirmó el exentrenador del Sevilla.
EL PARTIDO DEJÓ LA ENFERMERÍA MAÑA LLENA
El partido ante el Villarreal dejó jugadores tocados en las filas del Zaragoza. "La lesión de Lanzaro sí es preocupante porque es muscular, que sepáis que no es el 'virus FIFA', desgraciadamente su suegro falleció esta semana y se tuvo que ir a Italia. Lo ha pasado mal, era un hombre joven, su mujer es hija única. El jugador llegó a entrar lo antes posible pero, está claro, el viaje, las preocupaciones, la situación, todo pesa, y Lanzaro ha pagado el esfuerzo", explicó Jiménez.
"Lo de Lafita sí que es una desgracia porque se ha torcido el tobillo, entra dentro del juego, y lo tiene bastante inflamado", explicó el técnico.
Al final, tal y como ha declaro el propio entrenador del Zaragoza, los futbolistas terminaron exhaustos. "Los jugadores no podían hablar del cansancio, que es lo que quiero, independientemente del resultado", afirmó.
"Yo me tengo que comprar unos zapatos nuevos, los he roto, me he llenado de cal, el traje me da igual para eso están las tintorerías. Tenemos que dar la cara, no podemos ir de 'guapitos' ni dar excusas. He visto un vestuario en donde los jugadores en las últimas escaleras se ponían las manos en los cuádriceps para ayudarse a subir. Esa es la obligación y hasta el final será así", dijo el técnico.
Por último, Jiménez afirmó que su equipo luchará por la salvación hasta el final. "Es cierto que volveremos a perder, pero tenemos que intentar ganar cada partido que nos queda. Hoy he visto vibrar el campo, me he emocionado y me emociona recordarlo. El día que seamos todos uno, el Zaragoza será el temido equipo que yo he vivido como futbolista y entrenador, y ese día va a llegar", terminó.
