MADRID, 18 Ene. (EUROPA PRESS) -
El entrenador del Atlético de Madrid, Quique Sánchez Flores, lamentó que su equipo se encuentre inmerso "en una temporada de turbulencias máximas" y se mostró aliviado tras el triunfo ante el Real Mallorca (3-0), ya que "de no haber ganado, el equipo hubiera arrastrado una pequeña depresión"
"Trabajamos para que las tormentas pasen. Se ganó un partido complicado ante un rival difícil. No estamos en un buen estado, y a los jugadores hay que darles cariño. Veo al futuro con los jugadores más relajados y con optimismo. Son mejores jugadores de lo que parecen y seguro que recuperarán la confianza", señaló Quique en rueda de prensa.
En cuanto al encuentro que jugó su equipo, el madrileño apuntó que "de no haber ganado, el equipo hubiera arrastrado una pequeña depresión". "Ahora afrontamos el encuentro del jueves (contra el Real Madrid) con ganas y confianza. Será un partido que nadie querrá perderse. Sabemos lo que significan los choques ante el Real Madrid para nuestra afición y para nuestros jugadores. Es algo más que pasar a semifinales", explicó.
Sánchez Flores, que volvió a quejarse por jugar un lunes, apuntó que su equipo está atravesando "una temporada de turbulencias máximas" y que añora contar con "cuatro o cinco puntos más" en la tabla que haría estar "más felices" a los atléticos.
En cualquier caso, el técnico cree que su equipo se "en una buena posición para encarar la segunda vuelta de cara a conseguir" su objetivo principal: la clasificación para la Liga de Campeones.
"Sabemos que no estamos en el mejor momento, pero saldremos adelante como lo hicimos el año pasado. Estamos en ese grupo de posibles equipos que luchan por la Champions. Ahora los rivales directos vendrán a nuestro estadio", recordó Sánchez Flores, quien de cara al jueves pidió "salir a jugar y a marcar pronto" para encarrilar un partido de "dificultad máxima". "Hay confianza máxima en mis jugadores y en la afición", zanjó ante la visita del Real Madrid.
