"Toca crecer e innovar"
MADRID, 30 Nov. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Liga Nacional de Fútbol Sala (LNFS), Santiago Márquez, considera que el deporte que rige puede convertirse "en el segundo deporte del país" porque para ello cuenta "con todos los ingredientes necesarios".
De todos modos, el dirigente, en una entrevista concedida a Europa Press, apela para ello a "un planteamiento diferente" porque "el producto deportivo poco se puede mejorar" y advierte que "sería un error" estancarse en el presente porque, en su opinión, "toca crecer".
"Creemos que tenemos capacidad para ampliar el mercado y ocupar una posición estratégica que la Federación Española (RFEF) y el CSD también nos han encargado. Tenemos que mirar atrás para ver que todo ha evolucionado en los últimos 16 años y ahora es el momento de mirar de otra forma y hacer llegar el fútbol sala a otros sectores", explicó.
Márquez tampoco olvida que para crecer ahora tienen "la suerte de encontrar un socio como Santa Mónica Sports", empresa que gestionará los derechos comerciales de la LNFS en los próximos cuatro años, y así aspirar a "estar en el podio virtual" de los deportes nacionales.
Además, el presidente de la LNFS se apoya en que el fútbol sala cuenta a su favor con "los mejores equipos, jugadores, entrenadores y estructuras". "Además tenemos la experiencia de haber ido por detrás de otros deportes que nos han enseñado los errores posibles", indicó.
Sin embargo, las audiencias marcan que el fútbol sala está perdiendo cierto interés, algo que el mandatario opina que no es "un problema", aunque sí "una alarma". "Es obligatorio cambiar y por ello decidimos organizar una jornada de trabajo con profesionales para analizar todo porque nos toca innovar y pronto", insistió.
"LA MOCIÓN DE CENSURA SIGUE VIVA".
Santiago Márquez se presentará a la reelección como presidente pese a sufrir una moción de censura a principios de septiembre, medida que insiste que hizo "daño" al fútbol sala y que continúa "viva" de cara a la Asamblea del próximo 16 de diciembre.
El dirigente confesó que la moción fue "un sufrimiento duro en lo personal" y que la base de las acusaciones "no tenían fundamento". "No entiendo que para cambiar un representante se haga daño a la casa madre. El cambio se puede hacer de varias formas, pero han usado el contrato con Santa Mónica Sports como arma arrojadiza", aseguró.
"Algunos olvidaron que habría sido más fácil consultar el tema porque independientemente del presidente que haya el contrato seguirá estando", añadió el mandatario, que prefiere y le "alegra" la posibilidad de que haya un rival para el sillón presidencial "porque no es normal que se intente hacer política sin tener una persona y ahora los clubes podrán valorar".
Respecto a los clubes disidentes, Márquez reconoció que "ninguno" le había pedido abandonar la Asociación, algo que vería como un "error". "No se puede hacer cada uno la guerra por su cuenta y así se lo he dicho a los clubes porque creo que una construcción de futuro pasa por proyectos personalizados. Si lo hicieran supondría la desaparición de esta Asociación", señaló.
"PRUDENTES" ANTE LOS CONTACTOS CON REAL MADRID.
Márquez se refirió igualmente a los contactos para la presencia de un equipo del Real Madrid en la Liga avisando que había que ser "muy prudentes con las intenciones de los clubes" y subrayando que hasta el momento sólo había habido "contactos", desmintiendo además que hubiesen surgido problemas relacionados con "los derechos" de la entidad madridista.
Asimismo, el presidente de la LNFS indicó que "en próximas fechas" tendrán más contactos y que el FC Barcelona se prestaría para ayudar en todo lo posible al conjunto blanco, que tiene dos fórmulas para entrar en la Liga.
"Por un patrocinio (modelo actual del Celta de Vigo) y por estructura propia a través de una fusión, lo que veo difícil porque debería cambiar su estructura fiscal, o por una habilitación de una fórmula federativa que se lo permita", detalló.
Márquez también habló del cambio en el sistema de competición de la Copa de España que ahora permitirá que "un número mayor de equipos pueda optar a disputarla" y a la creación de una "comisión delegada" para que los clubes "tengan más participación".
Este organismo estaría formado por representantes de clubes en un intento de "descentralizar" la Liga y que decidiría con "rapidez y agilidad" los cambios que se propusiesen, entre ellos un posible cambio en el formato de la fase regular.
