El consejo de Telepizza desaconseja la OPA de Zena, aunque considera "justo" su precio

Actualizado: jueves, 18 mayo 2006 21:01


MADRID, 18 May. (EUROPA PRESS) -

El consejo de administración de Telepizza considera "hostil" la Oferta Pública de Adquisición de acciones (OPA) lanzada sobre la compañía por el Grupo Zena (CVC) y la desaconseja por los efectos desfavorables que tendría la operación sobre los a accionistas, franquiciados y empleados, aunque reconoce que el precio ofrecido es "justo" desde el punto de vista financiero.

En su informe sobre la oferta, remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el consejo advierte de que si la operación se saldara con éxito, podría acarrear el cierre de restaurantes y la pérdida de un significativo número de puestos de trabajo.

El presidente del consejo y de la compañía, Pedro Ballvé, no participó en la votación sobre la OPA por su conflicto de interés al haber impulsado la oferta que lanzó Carbal junto a los fondos Permira sobre Telepizza a razón de 2,15 euros por título.

La desfavorable opinión del órgano de gobierno sobre esta oferta de compra se sostiene en que Zena es actualmente un competidor de mercado de la cadena de comida rápida, por lo que representa "intereses contradictorios y contrapuestos con el interés social de Telepizza".

No obstante, el máximo órgano de gestión de la empresa reconoce que la contraprestación ofrecida por el 100% del capital social a razón de de 2,4 euros por título "es justa desde el punto de vista financiero", y valora positivamente que ésta se satisfaga íntegramente en metálico.

Entre las razones que esgrime para justificar su rechazo a la primera OPA hostil de la historia impulsada por un 'private equity' destaca que el folleto de Zena no contenga ninguna "predicción financiera debidamente soportada" sobre el grupo resultante de la integración, lo que, a su parecer, suscita "serias dudas sobre su rentabilidad".

Este planteamiento se agrava si tiene en cuenta que Zena contempla la posibilidad de que Telepizza resulte endeudada para refinanciar la deuda del grupo, a lo que se añade que las alternativas de integración podrían ser dilutivas para el accionista que no acuda a la oferta y, por tanto, "perjudiciales".

FUTURAS DESINVERSIONES

Según sus previsiones, las autoridades de la competencia podrían condicionar la autorización de la operación a desinversiones, ya que la empresa resultante podría ostentar una posición dominante en casi todas las posibles configuraciones del mercado relevante.

En este sentido, concreta que "la proximidad de las tiendas de Telepizza y Pizza Hut operadas por el grupo Zena podrían determinar el cierre de un número significativo de tiendas de uno u otro formato tras la integración, con la consiguiente y significativa pérdida de puestos de trabajo".

Bajo este panorama, el consejo advierte de que la actual relación entre Telepizza y sus franquiciados se modificaría "sensiblemente", ya que ahora éstos últimos actúan "como socios", mientras que en el escenario resultante tras la fusión, el franquiciado "estaría compitiendo" con las tiendas propias del grupo Zena que explotan otras marcas comerciales.

Advierte así de que "en el supuesto conflicto territorial", entre una tienda de Zena y una franquiciada de Telepizza "no pueden descartarse situaciones de discriminación a favor de las tiendas propias del grupo Zena", ni que éste pudiera reconvertir la marca Telepizza en Pizza Hut, lo que entorpecería el negocio de los franquiciados.

La mayor eficiencia, productividad y solvencia de Telepizza frente al grupo Zena también figura en su alegato contra la propuesta de compra. Según sus cálculos, la rentabilidad operativa de Telepizza es del 9,2% y la de Zena del 2,67%, por lo que la de la empresa fruto de la fusión podría ser del 6,29% "gracias a la aportación de Telepizza".

LOS CONSEJEROS NO LA ACEPTARAN

La salida de personas clave de Telepizza y la pérdida de talento en la empresa es otro aspecto negativo, según el consejo de administración, por lo que sus miembros titulares de un total de 19.253 acciones, se han comprometido a no aceptar la oferta de Zena.

El organismo que preside Manuel Conthe autorizó hace exactamente una semana la oferta de Zena, que supera en un 11,6% la formulada por Carbal y Permira, la primera autorizada, al entender ajustados sus términos a las normas vigentes y considerar suficiente el contenido del folleto explicativo.

El organismo supervisor de los mercados subrayó además que la oferta lanzada por el Grupo Zena a través de Food Service Project, participada por los fondos CVC e Inveralia y que valora la cadena de comida rápida en 639 millones de euros, tiene la consideración de competidora.

Concretamente, la oferta de Zena se dirige a 265.035.922 acciones y 125.296 obligaciones convertibles a razón de 2,4 euros por título y entre 24,526 y 24,783 euros por obligación, y está condicionada tanto a la la aceptación del 49% del capital social como al desblindaje de los estatutos.

El grupo propietario de las enseñas Foster's Hollywood, Cañas y Tapas, y principal franquiciado de Burger King, estima que si la operación se salda con éxito, dará lugar a un grupo con unas ventas totales superiores a 730 millones de euros, que dispondría de 1.223 establecimientos y más de 12.400 empleados.

Además de competir con la oferta formulada por la familia Ballvé y los fondos Permira, la oferta de Zena está en liza con la propuesta mejorada del grupo portugués Ibersol, que supera en un céntimo su contraprestación (2,41 euros).