Economía/Empresas.- La CE autoriza parcialmente la fusión entre Veolia y Transdev

Actualizado: jueves, 12 agosto 2010 19:46


BRUSELAS, 12 Ago. (EUROPA PRESS) -

La Comisión Europea autorizó hoy de manera parcial la fusión entre Veolia y Transdev y encargó a las autoridades nacionales de la competencia de Francia y Países Bajos analizar el impacto de la operación en sus respectivos mercados domésticos de transporte de pasajeros, tal y como habían solicitado París y La Haya.

Tras un examen preliminar, el Ejecutivo comunitario ha llegado a la conclusión de que la fusión conllevaría un importante solapamiento de las actividades de las dos empresas en el sector del transporte galo y holandés, por lo que ha devuelto el caso a los dos países implicados para que lo estudien con arreglo a su derecho interno.

No obstante, la CE ha aprobado el proyecto de fusión de las actividades de Veolia Transport y Transdev en países terceros, es decir, fuera de Francia y Países Bajos, al constatar que no impedirá la competencia en el sector del transporte internacional de pasajeros por autocar en el espacio económico europeo.

El pasado 25 de junio, la CE recibió la notificación de un proyecto de concentración en virtud del cual las francesas Veolia Environnement y Caisse des Dépôts et Consignations (CDC) trasladarían sus respectivas filiales de transporte, Veolia Transport y Transdev, a una nueva entidad: Veolia Transdev. Gracias a esta operación, Veolia Environnement y CDC se hacían con el control conjunto de Veolia Transdev.

Veolia Transport ofrece servicios de transporte público de viajeros y realiza la gestión de residuos urbanos, departamentales, regionales y nacionales en el Hexágono. Transdev, por su parte, es un operador de transporte público urbano e interurbano de tren, tranvía, metro, autobus, autocar, barcos fluviales y bicicleta, sobre todo en Europa.

Francia y Países Bajos habían pedido a la Comisión reenviar a sus autoridades nacionales de la competencia el aspecto de la fusión que afectaba a los mercados francés y holandés, dado que la operación amenaza con afectar seriamente la competencia en sus respectivos territorios. Bruselas les ha dado la razón al considerar que las autoridades galas y holandesas están en mejor posición para examinar las consecuencias de la fusión.