EL CAIRO, 8 May. (Reuters/EP) -
Egipto amplió hoy el registro para que más personas puedan acceder al sistema de cartillas de racionamiento y así llegar a 17 millones de personas más al mismo tiempo que dobló la cantidad de arroz que los titulares de las mismas reciben cada mes, en un esfuerzo por contrarrestar los efectos del aumento del precio de los alimentos.
Egipto, que cuenta con una población de 75 millones de personas, no había ampliado el registro de los sistemas de racionamiento desde 1988. "Hasta ahora hemos recibido aproximadamente 17 millones de ciudadanos nuevos (...) Esto significa que cubriremos a cerca de 55 millones de personas", declaró a Reuters el ministro de Solidaridad Social, Ali Musailhi.
En Egipto, la inflación interanual aumentó en mayo hasta alcanzar el 16,4% y el Gobierno intenta contener el creciente descontento general por el aumento de los precios que están acentuados por los bajos salarios o los disturbios como el del mes pasado en una ciudad del Delta del Nilo que se saldó con tres trabajadores muertos, dentro de un intento de una fábrica textil de ir a la huelga.
Los egipcios que tengan cartilla de racionamiento podrán comprar por persona y mes dos kilos de arroz --el doble de la cantidad anteriormente permitida--, además de 2 kilos de azúcar, 1,5 litros de aceite y 50 gramos de té. "Una familia de cuatro personas conseguirá así suficiente cantidad para todos los miembros", afirmó Musailhi.
Los precios mundiales de los alimentos básicos aumentaron más de un 40% en el último año y están provocando escasez, aprovisionamiento general de suministros y numerosos disturbios en un gran número de países en desarrollo, lo que ha provocado que Naciones Unidas alerte de la malnutrición y el malestar social que derivarán de esta nueva situación mundial.
Pero estos problemas no suceden sólo en Egipto. En Tayikistán, una empobrecida república de Asia central, sus problemas empeoraron debido a una plaga de langosta que amenaza sus cultivos de maíz y trigo.
El mes pasado, la organización de Naciones Unidas afirmó que las langostas habían infestado una zona de 150.000 hectáreas --un 30% más que el año pasado-- y podría afectar a los suministros de alimentos en una nación de siete millones de habitantes.
FRACASO DE LA FUMIGACIÓN
La rápida reproducción de los insectos hizo que devoraran 25.000 hectáreas de los cultivos de trigo ya el año pasado, después de que Tayikistán no pudiera fumigar con pesticidas las zonas afectadas debido a la falta de fondos.
Por esto, Naciones Unidas está trabajando con este país para erradicar la plaga. "Esperamos frenar a las langostas en las tierras de pastos y tenemos todos los recursos necesarios para ello", dijo el director de la compañía que lucha contra esta plaga, Muzafar Jurayev. "Si fracasamos, el daño podría contabilizarse en millones de dólares", añadió.
En Siria, como en Egipto, la seguridad alimentaria es la piedra angular de la política del Gobierno. Después de que el mal tiempo afectara a la producción casera de trigo, los sirios pueden verse obligados a recurrir en sus reservas estratégicas para satisfacer las necesidades domésticas.
Un miembro del Ministerio de Agricultura sirio, Mohamad Hasan Katana, afirmó que las lluvias este año fueron de un 40% por debajo del nivel normal y que la producción de trigo bajará hasta los tres millones de toneladas desde los 4,1 millones que se recolectaron en 2007.
Muchos países han respondido a los altos precios de los alimentos mediante tasas impositivas y otras restricciones a las exportaciones para intentar asegurar los suministros adecuados de cada nación.
La prohibición de las exportaciones por parte de India y Vietnam, el segundo mayor exportardor mundial, han ayudado a que Asia haya aumentado, y en algunos países hasta triplicado, los precios este año.
Por ejemplo Tailandia, el mayor exportador de arroz del mundo, espera vender más de 9 millones de toneladas de arroz en el extranjero este año, prácticamente lo mismo que el año pasado, pero a unos precios aún más elevados. Los precios de arroz tailandés se suavizaron esta semana tras haber alcanzado un récord de más de 1.000 dólares (casi 650 euros) por tonelada.
"Todo el mundo ha dirigido su foco de atención sobre Tailandia y este año será el año de oro para las exportaciones de arroz tailandesas", afirmó a los periodistas el ministro de Comercio tailandés, Mingkwan Sangsuwan.
