MADRID, 4 May. (EUROPA PRESS) -
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, se ha reunido este jueves en Madrid con la comisaria de Interior de la Unión Europea, Ylva Johansson, a quien ha trasladado "la actitud constructiva" que ha percibido en sus homólogos comunitarios de cara alcanzar un próximo acuerdo en el Pacto sobre Migración y Asilo.
"Aunque sigue habiendo posturas divergentes, las distancias ya no son tan grandes como hace medio año y todos somos conscientes de que queda poco tiempo y de la necesidad de hacer concesiones para alcanzar consensos cuanto antes", ha explicado Grande-Marlaska.
Según ha informado Interior, esta es la impresión que le ha transmitido el ministro a la comisaria, después de las reuniones mantenidas desde el pasado 3 de febrero con los socios de la UE para la preparación de la presidencia española de la Unión del próximo semestre.
En los últimos tres meses Grande-Marlaska ha visitado Roma, Bruselas, Berlín, Varsovia, Sofía, Bucarest, Viena y Budapest y también se ha reunido con los miembros del MED5 en Malta. El Ministerio ha explicado que, en este periodo, el ministro ha visitado también las agencias europeas de Frontex, Cepol y Europol y ha mantenido un encuentro con el presidente del Comité LIBE del Parlamento Europeo, Juan Fernando López Aguilar.
En la reunión, Grande-Marlaska también ha destacado la cooperación con los países de origen y tránsito de la migración como una de las prioridades de la presidencia y ha propuesto a la comisaria la realización de un viaje conjunto para continuar fortaleciendo la dimensión exterior de la política migratoria de la UE. "Una política que ha dado muy buenos resultados a España en colaboración con países africanos", ha precisado el ministro.
A través de un comunicado, el departamento que dirige Marlaska ha apuntado que durante el encuentro se ha abordado también la situación del proceso de ampliación de Schengen a Bulgaria y Rumanía, que España se ha comprometido a promover durante su presidencia. En este sentido, el ministro se ha mostrado partidario de establecer como método de desbloqueo, y "si fuera necesario", un camino progresivo en tres etapas hasta el levantamiento total de los controles, "con el objetivo de superar las reticencias mostradas por algunos países a la ampliación".
