Actualizado 26/04/2011 17:07

Expertos señalan la innovación agrícola como clave para reducir la pobreza y estabilizar el clima

Campo de cultivo
EP


MADRID, 26 Abr. (EUROPA PRESS) -

El informe 'La Situación del Mundo 2011, publicado por el Instituto Worldwatch de Washington, ha señalado la innovación agrícola como clave para reducir la pobreza y estabilizar el clima llevando a cabo prácticas como la ecoagricultura o aprovechando el "potencial nutritivo de las verduras; el aprovechamiento del agua; la investigación; la fertilidad del suelo; la biodiversidad local; o la adaptación de los cultivos al cambio climático".

El trabajo, realizado a partir del conocimiento de expertos agrícolas, denuncia que casi medio siglo después de la 'Revolución Verde', gran parte de la humanidad sigue padeciendo hambre crónica. Así, señala que aunque las inversiones en desarrollo agrícola de los gobiernos, fundaciones e instituciones internacionales de préstamo "han aumentado de forma importante en los últimos años", están "muy lejos de lo que sería necesario para ayudar a los 925 millones de personas que sufren falta de alimentos en el mundo".

En este sentido, destaca que desde la década de 1980, cuando la financiación destinada a la agricultura alcanzó un máximo, el porcentaje agrícola de los fondos mundiales de ayuda al desarrollo ha descendido desde más del 16 por ciento al 4 por ciento actual. Además, señala que el próximo año "no es probable" que aumenten las inversiones, dado el panorama económico mundial actual.

"Gran parte de la financiación comprometida todavía no ha sido recaudada, y los fondos existentes no están siendo asignados eficientemente para garantizar que lleguen, por ejemplo, a los agricultores pobres de África", aseguran los expertos.

La codirectora de este proyecto, Danielle Nierenberg, ha apuntado que la comunidad internacional "ha desatendido segmentos enteros del sistema alimentario en sus esfuerzos por reducir el hambre y la pobreza". A su juicio, "las soluciones no pasan necesariamente por producir más alimentos, sino por mejorar la comida de los niños en las escuelas, el modo en que se procesan y comercializan los alimentos y el tipo de empresas alimentarias donde se invierte".

Nierenberg ha señalado que "está demostrado que servir productos cultivados localmente en los comedores escolares constituye una estrategia eficaz para reducir el hambre y la pobreza en muchos países africanos, con grandes similitudes con los programas 'del agricultor al comedor' que están teniendo resultados muy positivos en Estados Unidos y en Europa".

Además, ha denunciado que "alrededor del 40 por ciento de los alimentos producidos actualmente en el mundo se pierden sin llegar a consumirse, lo que supone grandes oportunidades para que los productores y las familias ahorren dinero y recursos reduciendo estas pérdidas".

15 MEDIDAS PARA MEJORAR LA SITUACIÓN

Para que esta situación mejore, los expertos han añadido al informe un total de 15 medidas "sostenibles" que, según han destacado, han demostrado "sus buenos resultados" a lo largo de los últimos años. En este sentido, se habla de la ecoagricultura; el potencial nutritivo de las verduras; el aprovechamiento del agua; la investigación y las habilidades de los propios agricultores y de las campesinas; la fertilidad del suelo; o la biodiversidad local de los alimentos.

Del mismo modo, se recomienda la adaptación de los cultivos al cambio climático; la gestión de las pérdidas de las cosechas; la alimentación en las ciudades; la compra de tierras africanas por inversores extranjeros; y la mejora de la producción de alimentos a través de la ganadería.

Los expertos señalan que este informe llega en un momento en el que muchas iniciativas para paliar el hambre y afianzar la seguridad alimentaria mundial -como Programa Mundial para la Agricultura y la Seguridad Alimentaria (GAFSP), el Programa Mundial de Alimentos (PMA) y el Programa de Desarrollo Integral de la Agricultura en África (CAADP)- pueden aprender de los proyectos ambientalmente sostenibles que están logrando buenos resultados.