MADRID, 17 Dic. (EUROPA PRESS) -
Un grupo de organizaciones no gubernamentales encabezadas por Amnistía Internacional (AI) ha reclamado a la ONU que refuerce el embargo de armas contra la República Democrática del Congo (RDC), cuya vigencia no ha impedido el abastecimiento de los grupos armados implicados en "crímenes de guerra y abusos generalizados contra los Derechos Humanos de la población civil".
"Los enfrentamientos entre grupos muy armados y fuerzas gubernamentales en la región de Kivu Norte, en el este de la República Democrática del Congo, han obligado a casi 300.000 personas --casi uno de cada cuatro habitantes de la provincia-- a huir, y son millones los que han muerto en los últimos diez años", se lee en una carta conjunta al Consejo de Seguridad de la ONU firmada por varias secciones nacionales de Amnistía Internacional y por un amplio grupo de ONG, muchas de ellas africanas.
En la carta, Amnistía Internacional y el resto de organizaciones piden a la ONU que refuerce su embargo de armas contra la RDC y en su carta al Consejo y advierten de que en la RDC siguen cometiéndose abusos diarios contra la población civil, homicidios y violaciones generalizados "debido a la proliferación de armas y municiones".
"Pese a que el embargo de armas de la ONU está en vigor desde hace años, los grupos armados han podido abastecerse de armas, municiones, material militar y otros suministros, lo que les ha permitido cometer crímenes de guerra y abusos generalizados contra los Derechos Humanos de la población civil", prosigue la carta, en la que se advierte de que "el Ejército congoleño también es responsable de numerosas violaciones de Derechos Humanos".
La carta denuncia que la fuerza de mantenimiento de paz de la ONU en la RDC (MONUC) no cuenta con ningún procedimiento para garantizar la salvaguardia, la distribución, el almacenamiento y el uso adecuados del material militar por parte de unidades identificadas de las fuerzas armadas congoleñas una vez que las armas entran en el país.
En la carta, las ONG piden al Consejo de Seguridad que extienda el embargo de armas a toda la RDC, salvo en casos excepcionales muy concretos y solicitan al Consejo de Seguridad que anime a la comunidad internacional a tomar medidas urgentes destinadas a abordar la falta de progreso del Gobierno de la RDC en la profesionalización de sus fuerzas de seguridad y en el control de sus arsenales.
Asimismo, instan a los Estados miembros de la ONU a que no dependan de los embargos de armas, sino que cooperen por el pronto establecimiento de un tratado internacional sobre el comercio de armas que dé especial relevancia a los principios de la Carta de la ONU y del derecho internacional de los Derechos Humanos. Está previsto que, en la próxima semana, la Asamblea General de la ONU someta a votación la decisión de seguir adelante con el proceso de elaboración del tratado sobre el comercio de armas.
