Actualizado 28/04/2010 15:52

HRW denuncia los abusos contra las empleadas de hogar inmigrantes en Asia y Oriente Próximo

La organización lamenta las escasas reformas laborales de los gobiernos asiáticos y de Oriente Próximo


MADRID, 28 Abr. (EUROPA PRESS) -

La organización Human Rights Watch (HRW) ha denunciado este miércoles que las reformas laborales emprendidas por los gobiernos asiáticos y de Oriente Próximo están muy por debajo de las protecciones mínimas necesarias para hacer frente a los abusos que sufren las mujeres inmigrantes que trabajan como empleadas de hogar.

A pesar de las recientes mejoras, millones de mujeres africanas y asiáticas que son empleadas domésticas se enfrentan a la explotación y a situaciones de violencia, según el informe que HRW ha publicado previo al 1 de mayo, Día Internacional del Trabajo.

El informe 'Lenta Reforma: Protección de las Trabajadoras Domésticas Inmigrantes en Asia y el Oriente Próximo' revisa las condiciones laborales de ocho paises: Líbano, Jordania, Arabia Saudí, Kuwait, Emiratos Árabes Unidos, Bahréin, Singapur y Malasia, que cuentan con un amplio número de este tipo de empleadas.

Varios países de Oriente Próximo y Asia dan acogida a un número importante de empleadas domésticas inmigrantes, que van desde 196.000 en Singapur y 200.000 mujeres en Líbano, 660.000 en Kuwait y 1.5 millones en Arabia Saudí. Este tipo de trabajo es un empleo casi fundamental para mujeres de Indonesia, Sri Lanka, Filipinas, Nepal, India y de Etiopía y sus ingresos constituyen una proporción significativa de los miles de millones de dólares de las remesas enviadas cada año a sus países de origen.

Durante los últimos cinco años, los investigadores de HRW han demostrado que los inmigrantes que trabajan en el servicio doméstico se enfrentan a una serie de abusos como el impago de salarios, el exceso de horas de trabajo sin descanso estipulado y las tasas exorbitantes de contratación. También comprobaron que estar aislado en una casa particular y estar confinado en el lugar de trabajo contribuye a la violencia psicológica, física, sexual, al trabajo forzoso y al tráfico de personas.

REFORMAS

El informe examina los progresos en la ampliación de la protección de los trabajadores del hogar en la legislación laboral y reclama la reforma de los sistemas que contribuyen a su abuso, que se asegure la respuesta efectiva por parte de la Policía y los tribunales a la violencia física y sexual y que se permita a la sociedad civil y a los sindicatos a organizarse.

"Varios Gobiernos han hecho mejoras concretas para los trabajadores del hogar inmigrantes en los últimos cinco años, pero en general, las reformas han sido lentas, progresivas, y muy discutidas", explico la investigadora sobre los derechos de las mujeres de HRW, Nisha Varia. La mayoría de los gobiernos excluyen a los empleados domésticos de su legislación laboral, negándoles protección que sí se garantizan a los demás trabajadores, como la limitación de los horarios de trabajo o un día de descanso semanal.

Las reformas laborales "suelen encontrar una fuerte resistencia tanto de los empresarios, que están acostumbrados a que la empleada de hogar esté todo el día, como de los propios trabajadores que se benefician de un sistema mal regulado", señaló Varia. "Los gobiernos deberían hacer de la protección de estos trabajadores vulnerables una prioridad", añadió.

Sólo Jordania ha modificado su legislación laboral para incluir a los empleados de hogar bajo garantías de protección, como la domiciliación bancaria mensual de su sueldo, el establecimiento de un día libre semanal, vacaciones anuales pagadas y el pago por enfermedad, y una jornada laboral máxima de 10 horas. Sin embargo, las trabajadoras domésticas no pueden salir del lugar de trabajo sin permiso de su patrón.

Las medidas tomadas por Jordania "merecen crédito por incluir el trabajo doméstico en su legislación laboral", declaró Varia. Sin embargo, en el caso de Singapur "se han perseguido enérgicamente los abusos físicos contra las trabajadoras domésticas, pero no se les garantiza ni siquiera un día libre a la semana", añadió Varia.

El informe denuncia a los gobiernos de Líbano, Emiratos Árabes Unidos, Kuwait, Bahréin, Arabia Saudí y Malasia por anunciar reformas para extender derechos a estos trabajadores y sin embargo, después de pasar varios años, ninguno ha adoptado las prometidas reformas.

"En lugar de garantizar la protección bajo las leyes laborales, los gobiernos han creado contratos de empleo o han firmado acuerdos bilaterales con países que proporcionan mano de obra", acusó Varia. "Los contratos de trabajo y los acuerdos bilaterales son mejores que nada, pero una menor protección por parte de las leyes laborales refuerza la discriminación contra las empleadas domésticas".

La regulación del trabajo doméstico no sólo se está produciendo a nivel nacional, sino también a nivel mundial. La Organización Internacional del Trabajo comenzará el próximo junio una reuniones formales para abordar la relevancia de la protección de esta importante fuente de empleo para miles de personas en el mundo.