EUROPA PRESS/JUNTA DE ANDALUCÍA
LA RINCONADA (SEVILLA), 8 (EUROPA PRESS)
La consejera de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural de la Junta de Andalucía, Carmen Ortiz, ha anunciado este viernes que la Junta va a poner en marcha en las próximas semanas una campaña de promoción dirigida a concienciar al consumidor sobre las cualidades de la patata nueva o temprana, tal y como se comprometió con la Asociación de Empresas Productoras de Frutas y Hortalizas y Exportadoras de Andalucía y Extremadura (Asociafruit) en febrero para apoyar al sector.
La representante del Gobierno andaluz, que ha inaugurado en La Rinconada (Sevilla) el IV Congreso de Patata Nueva de España, ha asegurado que "el mejor respaldo que podemos daros como Administración es aquel dirigido a informar y formar a la sociedad sobre los beneficios que aporta este producto, recién extraído de la tierra, y cómo diferenciarlas de las patatas foráneas".
Según ha informado la Junta en una nota, la campaña, que se realizará principalmente en radio, pretende transmitir un mensaje directo, que llame la atención del consumidor, y que divulgue los valores saludables de la patata nueva con cuñas en las que se alienta al consumidor a fijarse en la etiqueta para comprobar su origen. Asimismo, se incluirán recomendaciones para su fácil identificación.
Ortiz ha subrayado la "importancia" de crear "un producto diferenciado, que sea conocido por los consumidores y de un valor añadido, lo que conlleva ofrecer un producto homogéneo y bien presentado con calidad y máximas garantías".
En este sentido, ha informado de que desde la Consejería "hemos pedido al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente que agilice los trámites para publicar la modificación de la norma de comercialización de la patata dirigida a lograr un mejor etiquetado y aumentar la transparencia para el consumidor".
En una carta remitida a la ministra del ramo, Isabel García Tejerina, Ortiz ha trasladado la "preocupación" de Andalucía por la situación en la que se encuentra el sector debido a la "competencia desleal de otros países que comercializan patata de conservación como si fuera patata nueva".
Durante su intervención, la consejera ha resaltado que la patata nueva de Andalucía "tiene cualidades para conquistar los mercados y paladares, además de ser asequible, sana y versátil y con un gran potencial dentro de la industria de la transformación, mediante la elaboración de productos de IV y V gama". "Se trata además de un cultivo sostenible y de bajo impacto ambiental", ha manifestado Ortiz.
Por este motivo, según Ortiz, "hay que poner énfasis en conseguir explotar estas cualidades diferenciales y hacer que sea un cultivo más competitivo, para hacer frente a las circunstancias adversas que hacen que éste sea un sector frágil, en el que los precios fluctúan fuertemente y evitar así que los agricultores abandonen el cultivo".
Entre otras, se ha referido a la "competencia de países que comercializan tubérculos que han sido almacenados en cámaras durante meses como si fueran patata nueva, fresca; a la necesidad de transparencia en el etiquetado o la alerta por presencia de Epitrix en patata andaluza".
Por último, la consejera ha animado al sector a constituirse como interprofesional, "ya que desde el consenso podéis contar con más instrumentos financieros para la promoción y otras actuaciones que beneficien al sector".
PRINCIPAL PRODUCTORA DE PATATA TEMPRANA
La Junta ha destacado que Andalucía es la principal productora de patata temprana, gracias a su climatología que permite su cultivo prácticamente durante todo el año. Actualmente, hay 10.110 hectáreas andaluzas de cultivo de patata y una producción de casi 297.000 toneladas.
Según ha indicado la Junta, el 39 por ciento de la superficie total se encuentra en Sevilla, seguida por Cádiz, con un 18 por ciento, y Málaga, con un 13 por ciento. De los cuatro tipos de patata que se siembran en Andalucía --extratemprana, temprana, media estación y tardía--, la temprana es la que tiene "mayor relevancia", y supone el 44 por ciento de toda la superficie sembrada, seguida de la de media estación, que ocupa alrededor del 33 por ciento.
El valor de la producción en 2015 ascendió a 78,47 millones de euros, un 6,55 por ciento más que en 2014. Las exportaciones de 2015, sin incluir la patata de siembra, aumentaron un 41 por ciento con respecto a 2014 en valor manteniendo el mismo nivel en volumen. Con respecto a la patata temprana, el aumento de las exportaciones fue mayor, un 68 por ciento más en valor y un nueve por ciento más en volumen.
Por provincias, el 89 por ciento de las exportaciones andaluzas provienen de las provincias de Sevilla y Cádiz, siendo Sevilla la que más ha exportado, alcanzando el 74 por ciento de las patatas frescas andaluzas. Con respecto a la patata temprana fresca exportada el año pasado por Andalucía, un 68 por ciento procede de Sevilla y un 29 por ciento de Cádiz.
Los principales países destino de las producciones andaluzas son Alemania, Bélgica, Reino Unido, Francia, Países Bajos y Portugal.
RESPUESTA DE LAS ADMINISTRACIONES PÚBLICAS
Por su parte, el presidente de Asociafruit, Marco Román, criticó que "la práctica generalizada de publicidad engañosa de las cadenas de distribución y minoristas se seguía produciendo sin que las administraciones públicas ofrecieran respuestas eficaces a una situación que pone en riesgo al sector y provoca una bajada de la confianza en el consumidor".
Asociafruit informó de que se había detectado una caída en las hectáreas de cultivo dedicadas a la patata, "que viene arrastrándose desde hace más de dos décadas". Así, de las 271.300 hectáreas de cultivo registradas en España en 1990, se pasó, en 2013, a 71.100 hectáreas, lo que supone una reducción del 73,7 por ciento. En el caso de Andalucía, de 23.000 hectáreas cultivadas, se pasó a 10.850 en 2013, lo que supone un descenso del 52,8 por ciento, según la asociación.
Esta reducción de la producción, señaló Asociafruit, tiene una "consecuencia directa sobre el volumen de empleo, ya que desde la década de los noventa, la caída del empleo directo ha supuesto una pérdida estimada de 33.000 puestos de trabajo a nivel nacional, a lo que hay sumar los empleos indirectos".
Para Román, se está generando una "gran paradoja" pues los consumidores de los mercados europeos "demandan la patata nueva española mientras que en nuestro país se consume patata de conservación, con lo que el consumidor está perdiendo su confianza en un producto que ha sido un referente en todos los hogares españoles".