La EKA/OCUV resalta que en estas fechas los consumidores tienen "los mismos derechos que en cualquier otra"
BILBAO, 2 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Organización de Consumidores y Usuarios Vasca, EKA/OCUV, prevé que, teniendo en cuenta los datos del año pasado, cada vasco se gastará entre 120 y 150 euros en esta temporada de rebajas, que comienzan hoy y finalizarán el 30 de septiembre.
Según informaron en un comunicado, las rebajas son una "muy buena oportunidad" para comprar siempre que se haga atendiendo a necesidades reales. Además, conviene comprobar que las prendas son de esta temporada y fijarse bien en la doble indicación de precios.
Tanto el inicio como la finalización de la temporada de rebajas las fija cada comunidad autónoma, aunque la Ley fija un periodo mínimo de una semana y un máximo de dos meses, y para poder acogerse a la Ley los comercios tienen que rebajar al menos la mitad de sus productos.
LOS MISMOS DERECHOS
Desde la Organización de Consumidores y Usuarios Vasca recordaron a los consumidores que sus derechos "no sufren ningún menoscabo en esta época" y que "pueden y deben exigir su cumplimiento" con el mismo rigor y exigencia que en cualquier otra fecha del año.
Sin embargo, señalaron que es "un buen momento para adquirir productos mucho más baratos sin que éstos pierdan calidad", pero que, para que la compra en rebajas resulte realmente eficaz, lo mejor es comprar sólo lo necesario. "Adquirir mercancías sólo porque estén rebajadas, con el riesgo de que no satisfagan necesidades concretas, puede resultar, a la larga, más caro", explicaron.
Asimismo, resaltaron que, como norma general, las rebajas son de precio, no de calidad, y que todos los artículos que se vendan como rebaja deben haber estado a la venta con anterioridad en el establecimiento y no pueden estar deteriorados.
En este sentido, explicaron que se debe revisar con atención la etiqueta. En los artículos textiles debe figurar la talla, la composición y el tratamiento aconsejable a efectos de lavado y planchado.
COMPROBACIONES AL COMPRAR
Además, se tiene que comprobar que, junto al precio rebajado, figura el precio antiguo o bien el porcentaje de rebaja del articulo. También se tiene que exigir la garantía al comprar bienes duraderos, que es de dos años, porque el vendedor está obligado por ley a facilitársela, y las rebajas no son una excepción. Esto es especialmente importante en la compra de electrodomésticos.
Asimismo, aconsejaron guardar los ticket de compra con sus correspondientes impuestos porque son necesarios a la hora de hacer una reclamación. En cuanto a cambios y devoluciones, los comercios está obligados a cambiar los artículos cuando sean defectuosos, siempre y cuando no se hayan usado.
Desde la OCUV recalcaron que se puede pagar con tarjeta de crédito, salvo advertencia en sentido contrario, en un lugar visible de la tienda. Los establecimientos que ofrecen este servicio durante todo el año, no pueden negarse a ofrecer este servicio en rebajas, ni imputar al consumidor el recargo del banco.
Además, aconsejaron comprobar la fecha de rebajas del establecimiento. Esta información debe figurar en un lugar visible y de fácil acceso para el consumidor. Las rebajas pueden durar un máximo de dos meses y un mínimo de una semana.
PRÁCTICAS COMERCIALES
La ley diferencia claramente las rebajas de los saldos y las liquidaciones. Los consumidores deben distinguir claramente entre estas tres formas de actividad comercial.
Los saldos son productos que han perdido valor de mercado, por estar deteriorados u obsoletos, siempre que no impliquen riesgo o daño para el consumidor. Deben anunciarse como tales y estar en poder del vendedor al menos seis meses antes de la fecha de comienzo.
Las liquidaciones son una venta de carácter excepcional, producida como consecuencia de una decisión judicial, cesación de la actividad, cambio de ramo, local u obra. Tienen como fin dar salida a todos los productos existentes en el local. Los artículos deben de estar previamente a la venta y el proceso no puede durar más de seis meses, aunque puede ser total o parcial.
Por otro lado, las rebajas son productos rebajados de precio por cambio de temporada o de estación. Todos los productos que se ofrecen en rebajas deben de haber estado a la venta con anterioridad en el establecimiento y no pueden estar deteriorados. El establecimiento debe tener al menos la mitad de sus productos rebajados y está prohibido la venta de productos fabricados exclusivamente para rebajas.
SANCIONES Y FALTAS
La organización de consumidores resaltó que la ley prevé sanciones para aquellos establecimientos que cometan infracciones o que violen la legislación en materia de rebajas dictadas en la Ley de Ordenación del Comercio Minorista.
Así, se consideran faltas leves realizar ventas en rebajas fuera de los casos autorizados por la ley o no hacer figurar en los artículos rebajados los precios habituales de los mismos.
Además, se considera una falta el no cumplir las obligaciones establecidas por la ley en las normas dictadas para su desarrollo que no sea objeto de sanción especifica.
Como faltas graves se considera ofrecer como rebajado artículos defectuosos, o que el comercio haya comprado expresamente para ofrecerlos en rebajas.
