BILBAO, 23 Abr. (EUROPA PRESS) -
La presidenta de la Asociación Clara Campoamor, Blanca Estrella Ruiz, ha afirmado este jueves que el juicio celebrado contra Juan Carlos Aguilar, conocido como 'el falso monje shaolín", "no terminará" hasta que se localice a todas las mujeres que aparecen "atadas" y a las que Juan Carlos Aguilar "está pegando" en los vídeos y fotografías incautados al acusado tras su detención el 2 de junio de 2013. "Aquí faltan víctimas y delitos", ha aseverado.
En declaraciones a los medios de comunicación tras retirarse el jurado popular a deliberar este miércoles, después de haberse celebrado el juicio desde el pasado 17 de abril en el Palacio de Justicia de Bilbao, Ruiz ha manifestado que Clara Campoamor pidió a la Ertzaintza y al Tribunal que "se encontrara a esas mujeres". "Y parece que se ha encontrado solo a cuatro", ha apuntado.
Por ello, cree que, "hasta que esto no se aclare, nunca se habrá terminado este juicio". "Se ha intentado llegar hasta alguna en Nigeria, Colombia o Ecuador y no están, sus familias no saben nada. Por lo tanto, esto no ha terminado, esas mujeres tienen que aparecer. Y nosotros vamos a valorar qué vamos a hacer a partir de ahora", ha indicado.
OBSTÁCULOS PARA EL JUICIO
Además, se ha quejado de que, durante la vista oral que se ha celebrado por los crímenes de Yenny Rebollo y Ada Otuya, no se les haya permitido acusar ni de violación ni de secuestro. "Por poco nos tenemos que poner de rodillas ante él (el falso shaolín) para pedirle perdón y acusarle de lo que le ha dado la gana. El que ha marcado la pauta ha sido él. A Clara Campoamor ningún asesino le marca las pautas penales", ha indicado.
En este sentido, ha denunciado que Aguilar ha presentado, de cara al juicio, un escrito en el que afirma que cometió los dos asesinatos con alevosía, pero sin ensañamiento, "y se le ha aceptado". "No sé si han picado, han querido ahorrar dinero o no sé por qué", ha dicho.
A su juicio, esto "es una barbaridad" porque cometió los crímenes "pero también las torturó, las pisoteó, a una la reventó el hígado y a la otra la descuartizó". "Cuando uno confiesa, que confiese de verdad", ha subrayado.
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