Falsificaba la documentación para intentar sortear las inspecciones de la Ertzaintza
BILBAO, 14 Mar. (EUROPA PRESS) -
Una mujer de 32 años ha sido detenida en Sestao (Bizkaia), acusada de la presunta sustracción de más de 2 kilogramos de oro en el establecimiento de compra-venta en el que trabajaba. La detenida falsificaba la documentación que aportaba en las inspecciones que periódicamente realiza la Ertzaintza en este tipo de locales. El valor del oro sustraído superaría los 40.000 euros en el mercado.
Según ha informado el Departamento vasco de Seguridad, para tratar de sortear los controles que de manera periódica realiza la Ertzaintza en todos los locales de compra-venta de oro, la ahora detenida falsificaba partes de la documentación relativa a los contratos de compra-venta, en los cuales se refleja el tipo de pieza, sus características, peso, quilates, etc, así como el precio abonado por las mismas. La documentación que la mujer aportaba en dichos controles presentaba una aparente normalidad y un rigor absoluto.
Sin embargo, las sospechas policiales comenzaron cuando se cruzaron los datos entre las documentaciones en poder de la Ertzaintza y la de la propia empresa.
La información aportada a la policía reflejaba todas las transacciones con datos reales, mientras que en la documentación interna de la empresa, no coincidían en un importante número de contratos. Estos habían sido manipulados, en cuanto al tipo y número de piezas, su peso y precio abonado por las mismas. Incluso se llegó a incluir una buena cantidad de piezas que tras ser estudiadas resultaron ser falsas.
Las sospechas de los agentes se vieron confirmadas también por el análisis de las grabaciones de algunos de los sistemas de seguridad del local, en las que se detectaban diversos comportamientos sospechosos de la mujer.
Contrastadas las diferentes evidencias, el pasado martes se procedió a la detención de la sospechosa para su puesta a disposición judicial, una vez concluidas las correspondientes diligencias.
UN CONTROL RIGUROSO
La Ley de Seguridad Privada de 1992 y el Reglamento de Seguridad Privada confieren a la Ertzaintza la misión de supervisar la instalación y el mantenimiento de las preceptivas medidas de seguridad en todos los establecimientos dedicados a la compra-venta de joyas y metales preciosos del País Vasco.
Actualmente hay registrados en Euskadi casi dos centenares de este tipo de establecimientos que, hasta el año 2010 no superaban la veintena.
