BILBAO, 17 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno vasco ha convocado para el jueves día 21 la primera reunión de esta legislatura de la Mesa General de la Administración, en la que están presentes las centrales sindicales mayoritarias que representan al conjunto de las cerca de 70.000 personas empleadas por la Administración Pública Vasca. El Ejecutivo ha mostrado su confianza en "llegar a acuerdos en torno a asuntos importantes de la negociación colectiva de 2013".
Según ha informado el Ejecutivo de Lakua, por parte del Gobierno acudirán al encuentro el viceconsejero de Función Pública, Andrés Zearreta y los directores de Función Pública, Juan María Barasorda, Relaciones Laborales, Estefanía Gordoa e Instituto Vasco de Administración Pública (IVAP), Maite Iruretagoiena.
El Ejecutivo trasladará a los sindicatos la necesidad de "llegar a un acuerdo en torno, principalmente, a asuntos importantes de la negociación colectiva de 2013 como la jornada laboral anual, los permisos retribuidos o el régimen de complementos a las retribuciones por razón de incapacidad temporal (IT) de los empleados públicos".
Zearreta ha reconocido que acudirá al encuentro con "vocación de acuerdo" porque considera que "hay margen para concertar con los sindicatos la implantación de las medidas de contención del gasto que estamos obligados a adoptar en 2013".
En este sentido, el viceconsejero de Función Pública pide a los sindicatos "responsabilidad ante la grave situación económica que atravesamos", una situación "en la que el conjunto de la sociedad vasca se verá necesariamente afectada tanto por el impacto de una merma del presupuesto de la administración en 1.200 millones de euros como por una situación sociolaboral que es ya dramática para muchas personas".
Zearreta considera que "ante los cambios legislativos que, proviniendo de diferentes frentes, vienen condicionando la toma de decisiones", es necesario moverse en un "marco de seguridad jurídica", no solo en lo que respecta a la actuación de la propia administración, sino también por las "afeccciones que decisiones cuestionables de anteriores ejecutivos vienen causando al conjunto de los trabajadores".
No obstante, ha apelado a "la negociación para encontrar un marco que nos sea propio y lo menos lesivo posible para unos empleados públicos que ya vienen aportando un decisivo esfuerzo".