Galdakao contará con un nuevo edificio con más de 200 consultas y un aparcamiento de 1.129 plazas que ocupará 5 de las 9 plantas previstas
BILBAO, 14 Feb. (EUROPA PRESS) -
La OSI Bilbao-Basurto iniciará este año en el Hospital Universitario Basurto la construcción del nuevo edificio de consultas externas (39.000 m2) que se dividirá en dos bloques que albergarán, a su finalización en 2027, alrededor de 250 consultas/salas de tratamiento/pruebas, salas de procedimientos, un área de radiología ambulatoria y el servicio de Farmacia.
Según ha informado el Departamento vasco de Salud, la inversión de 106 millones de euros contempla la construcción del nuevo edificio de consultas externas, cuyo plazo de ejecución se ha estimado que sea entre 36 y 40 meses, y permitirá ampliar los espacios, mejorar las infraestructuras, independizar los circuitos de atención a pacientes ambulatorios y reordenar la actividad asistencial en el resto del centro, así como las obras de modernización de las instalaciones actuales del Hospital Universitario Basurto.
El nuevo edificio de consultas externas se construirá en la parcela donde se encuentra en la actualidad el parking del hospital y en el terreno que ocupaba la antigua facultad de Medicina.
La nueva edificación se divide en dos bloques que comparten dos plantas de sótano y la planta baja. Ambos bloques cuentan con plantas de bajo rasante, una planta baja común y varias plantas en altura. En los sótanos se construirá el parking, que dispondrá de 443 plazas de aparcamiento.
Este edificio dispondrá del espacio necesario para hacer frente a una demanda creciente y dar respuesta a las nuevas prestaciones, a un nuevo modelo de organización asistencial basado en el abordaje multidisciplinar de la atención asistencial, a los nuevos perfiles asistenciales, a las consultas de alta resolución y mejorará las infraestructuras y equipamientos, creando un entorno "más seguro y accesible", tanto para la ciudadanía como para los profesionales.
Está previsto que la nueva edificación consolide un nuevo acceso al hospital, ya que asumirá el mayor porcentaje de flujo ambulante, convirtiéndose en la entrada principal al centro hospitalario.
Desde el punto de vista del impacto visual de este edificio, se ha elegido un diseño actual que se integre con el resto del hospital, que ha cumplido recientemente 115 años y forma parte del Patrimonio Histórico y, al igual que el resto del recinto, contará con un espacio arbolado y zonas verdes.
Se trata de un edificio más funcional, en el que se ha primado la accesibilidad y se ha dotado de sistemas de eficiencia energética y de iluminación natural que contribuya a crear espacios "más amables y confortables".
Así mismo, su diseño se ha planteado desde la perspectiva de la flexibilidad que permita adaptarse fácilmente a posibles cambios de futuro y a necesidades que puedan surgir con la aparición de nuevas técnicas y tecnologías.
Su construcción liberará otros espacios del hospital, lo que permitirá, a futuro, abordar un nuevo proyecto de reordenación de la actividad asistencial que la OSI ha denominado Bilbao Basurto Berria. Con este proyecto se pretende aprovechar los espacios existentes, reformar los espacios que queden libres con el traslado al nuevo edificio y crear nuevas infraestructuras que permitan integrar servicios con el objetivo de mejorar la atención asistencial.
GALDAKAO-USANSOLO
Por su parte, el Hospital Universitario Galdakao-Usansolo también contará con un nuevo edificio de consultas externas, con una inversión de más de 93 millones de euros. En la actualidad, el proyecto se encuentra en fase de desarrollo y su plazo de ejecución es de 36 meses.
La nueva edificación, con una superficie de 58.000 m2 distribuidos en nueve plantas, se divide en tres grandes áreas. La primera, dedicada al uso asistencial, acogerá las consultas externas, radiología ambulatoria y farmacia ambulatoria. Una segunda zona albergará los espacios de dirección/administración y aulas de docencia y, por último, el edificio dispondrá de un gran aparcamiento de 1.129 plazas -que ocupará cinco plantas- y que dará respuesta al problema de estacionamiento existente.
Estas plazas en planta destinadas a aparcamiento, junto con la llegada de la Línea 5 del Metro, que contará con una parada en el propio Hospital, permitirán derribar en un futuro el actual aparcamiento y volver a urbanizar la parcela sanitaria eliminando el tráfico interno, que se vería limitado a los vehículos de emergencias y de logística, en búsqueda de la seguridad vial y la humanización del entorno.
A nivel asistencial, el nuevo edificio de consultas externas contempla más de 200 salas destinadas a consultas y pruebas y cinco salas de procedimientos polivalentes, próximas a urología y dermatología.
Asimismo, el área de radiología contará con dos salas de mamografía, dos salas con telemando, dos salas TAC y seis salas de ecografía. En ese sentido, Osakidetza ha destacado la "flexibilidad" con la que se ha diseñado este edificio, que permite su adaptabilidad a las nuevas necesidades, tanto en el proceso de diseño y construcción como durante el resto de su vida útil.
Asimismo, esta nueva infraestructura permitirá liberar espacios en el edificio principal del hospital actual, lo que posibilitará abordar en un futuro la ampliación y adecuación del área de endoscopia, la ampliación del área hospitalaria de neumología -destinada a broncoscopia y rehabilitación respiratoria- o la ampliación del servicio de urgencias.
También contempla la unificación del servicio de cardiología, la ampliación del Hospital de Día Médico, habilitar una nueva unidad de hospitalización y mejorar otras áreas de logística.
La construcción de este nuevo bloque en la zona norte del recinto hospitalario precisa de la tramitación de un Plan Especial de Ordenación Urbana que ya está en marcha. Cuenta con un diseño uniforme y racionalista que "no compite con el entorno" y que pretende potenciar la relación con el espacio exterior. Sus fachadas, a modo de retícula cuadrada, ofrecen "una imagen permeable, uniforme y armoniosa".
El futuro edificio de consultas externas ocupa una franja de este a oeste de 185 metros de largo y 34 metros de ancho. Su fachada sur está orientada al resto del recinto hospitalario y permite la organización de accesos peatonales diferenciados. Un nuevo núcleo de comunicación vertical que se desarrolla a lo largo de la vertical de la fachada del edifico principal conectará a través de una pasarela con el nuevo volumen.
