Enfermeda prepara una dosis de vacuna. - JESÚS M. PEMÁN
VITORIA, 23 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Lehendakari, Iñigo Urkullu, ha trasladado por carta al presidente del mecanismo Covax, José Manuel Barroso, la voluntad del Gobierno de contribuir económicamente a la vacunación global y solidaria contra la pandemia de la covid-19, con el fin de que también sea distribuida entre los países empobrecidos y más vulnerables, según ha informado el portavoz del Ejecutivo Vasco, Bingen Zupiria.
En su misiva al ex presidente de la Comisión Europea y actual presidente del Patronato del Gavi, la alianza internacional
impulsada por la Organización Mundial de la Salud, que promovido el mecanismo Covax, de contribución público-privada para lograr una vacunación global y solidaria frente al coronavirus, Urkullu afirma que, si la solidaridad y humanidad no son "suficientes", se puede apelar a principios más "egoístas: la pandemia se supera en todo el mundo o no se supera".
Urkullu se ha dirigido este pasado lunes por escrito a Barroso para dejar constancia de la voluntad del Gobierno Vasco de "implicación activa" en el objetivo de lograr una vacunación global y solidaria en todo el planeta.
El Lehendakari le ha informado de que recientemente el Gobierno Vasco, primero, y el Parlamento Vasco, después, han expresado su apoyo público y decidido a esta vacunación global. En opinión de Iñigo Urkullu, "este objetivo debería ser compartido internacionalmente de forma multilateral y por compromiso con los principios de solidaridad y humanidad".
El Gobierno Vasco considera que la vacunación tiene que llegar a toda la población del planeta, y que la vacuna debe ser distribuida, especialmente, entre los países empobrecidos y entre aquellos que, desde el punto de vista de sus sistemas de salud, son más vulnerables.
El Lehendakari subraya que, "si los principios de solidaridad y humanidad no fueran suficientes" para convencer "de la importancia de una vacunación global, podría apelarse también a principios más 'egoístas'". "La pandemia, o se supera en todo el mundo, o no se supera. La seguridad propia, la economía propia y la salud pública propia de cada país no estarán a salvo si la inmunidad no alcanza a todos los continentes y países".
Iñigo Urkullu ya se sumó y respaldó el pasado 27 de febrero al llamamiento hecho en este sentido por el director de la OMS y por los miembros del Consejo Europeo en su declaración de 25 de febrero.
A lo largo de este año de pandemia, Euskadi ya ha demostrado su compromiso solidario ofreciendo recursos a otras comunidades autónomas, e incluso a otros países como Perú. Ahora, en la lucha contra una pandemia global, también trata de "reforzar la cooperación multilateral por la salud, mediante una vacunación global y solidaria".
COMPROMISOS DEL GOBIERNO VASCO
Para ello, el Gobierno Vasco asume dos compromisos. En primer lugar, apoyar los esfuerzos internacionales de Covax; y en segundo lugar, contribuir, de modo directo y por los cauces que se habiliten para ello, a que las vacunas lleguen a los países con menos recursos.
Iñigo Urkullu concluye su escrito expresando al presidente Barroso "la
voluntad y plena predisposición" de su Ejecutivo de hacer "una contribución económica" --que se determinará en próximas semanas-- al "esfuerzo global" que representa Covax.
"Tenemos una firme convicción sobre el relevante papel que pueden jugar Gobiernos subestatales con una vocación contrastada en materia de solidaridad internacional, cooperación descentralizada y ayuda humanitaria", añade.
En este sentido, solicita al presidente del Patronato del Gavi que se habilite un "cauce claro" para que el Gobierno Vasco y otros Ejecutivos no estatales "puedan hacer efectiva su contribución a este objetivo de una vacunación global y solidaria".