CNT pide la dimisión de Celdrán tras ordenar el Tribunal Supremo el derribo del 'cubo' de Biblioteconomía

BADAJOZ, 13 Nov. (EUROPA PRESS) -

La Confederación Nacional del Trabajo (CNT) pidió hoy la dimisión del alcalde de Badajoz, Miguel Celdrán, tras conocerse el fallo del Tribunal Supremo (TS) que ordena derribar el 'cubo' de la Facultad de Biblioteconomía.

En nota de prensa, CNT lamentó que "esta chapuza" --la construcción del 'cubo' y posterior derribo-- ocasionará una "importante merma" en los recursos económicos del ayuntamiento y consideró que en "un acto de vergüenza torera" los "políticos municipales con el alcalde a la cabeza" deberían irse "a casa".

De igual manera, la confederación confió en que las personas que, desde la Junta de Extremadura, dieron su "visto bueno" y se convirtieron en "cómplices necesarios", hayan puesto sus cargos "a disposición de quien los nombró" y sean "cesadas de inmediato".

"Como no creemos que suceda nada de lo anterior -un político no deja el cargo ni aunque se le eche agua hirviendo- esperamos, al menos, que pidan perdón a la ciudadanía primero por haberse saltado la normas urbanísticas a la torera y, segundo, por haber intentado burlar la Sentencia del TSJEx, de 2003 con una modificación ad hoc de las normas urbanísticas", apuntó.

También criticó el intento de "echar la culpa" a la Asociación de Amigos de Badajoz y "culparles del gasto" que ocasionará el derribo del 'cubo' cuando la CNT consideró que "todo este asunto ha sido un puro acto de soberbia política, tanto de los que mandan en el ayuntamiento--de Badajoz-- como en la Junta".

Al respecto, CNT manifestó su apoyo a la Asociación de Amigos de Badajoz que de una "manera altruista" han "seguido y conseguido" que el patrimonio histórico de la ciudad "no sea ni eliminado ni alterado", con lo que consideró "inadmisible" las "amenazas que se están vertiendo para llevarse la Facultad de Biblioteconomía fuera del casco viejo en un intento de tapar la nefasta gestión que de este asunto han hecho los organismos institucionales implicados".

La Confederación Nacional del Trabajo se mostró favorable a la rehabilitación del casco antiguo de la ciudad pero sostuvo que "en vez de construir cosas modernas lo que se debe hacer es rehabilitar lo que ya hay para mantener en lo posible la fisonomía histórica de la ciudad".

"No se deben mezclar churras con merinas y el pensar que, hacer un cubo de cristal y acero entre edificios de piedra es una cosa moderna, no deja de ser una ocurrencia de personas con complejo provinciano", añadió.

CNT pidió también la actuación de oficio del ministerio fiscal por si, de la actuación de "ediles y técnicos municipales así como de personas de la Consejería de Cultura", se desprenden "actos dolosos para las arcas del ayuntamiento y de la Junta".