Aboga por que en los consistorios queden "perfectamente claros dos referentes políticos", aunque subraya que el diálogo "sigue abierto"
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 2 Jun. (EUROPA PRESS) -
El BNG confirmó hoy que las negociaciones iniciadas el pasado jueves con el PSdeG para elaborar un acuerdo marco de gobernabilidad en los más de 70 ayuntamientos en los que las municipales abrieron esta posibilidad han entrado en un período de "pausa", con el objetivo de estudiar las "zonas de disensión" que mantienen en torno al modelo de coalición que quieren trasladar a los consistorios.
Fuentes nacionalistas informaron a Europa Press de que tras la segunda reunión de las dos comisiones que se encargarán de redactar el documento, mantenida ayer por la mañana, las conversaciones han quedado temporalmente en suspenso a fin de que cada una estudie por separado las propuestas planteadas.
Con todo, al igual que ya había precisado el secretario de Organización del PSdeG, Ricardo Varela, la comunicación entre ambas partes "sigue abierta" y para esta misma jornada está prevista una conversación telefónica entre el número dos socialista y el coordinador executivo del Bloque, Francisco Jorquera, en la que prevén contrastar fechas para celebrar una nueva reunión.
En este sentido, la agenda del PSdeG, que hoy reunió en Santiago de Compostela a su Comité Nacional --máximo órgano entre congresos-- para evaluar el mapa político posterior al 27-M y posteriormente organizó una comida, redujo las posibilidades de encuentro para este día.
Por ello, pese a la voluntad de las dos partes de "acelerar al máximo" el acuerdo para otorgar tiempo a los ayuntamientos "para negociar el reparto de áreas", ambas asumen que los plazos inicialmente estipulados, que preveían culminar el documento antes de la conclusión del presente fin de semana, podrían variar.
"TIEMPO AL TIEMPO"
Así, mientras en el PSdeG abogan por imprimir rapidez para "permitir a los ámbitos locales hacer su trabajo", desde el BNG apelan a "dar tiempo al tiempo" para perfilar un pacto "sin precipitaciones". "La fecha la establecerá el propio proceso de negociación", precisaron.
En esta línea, aunque el propio Varela rechazó esta mañana "especiales dificultades", el principal escollo radica actualmente en el reparto de poder de los ayuntamientos, puesto que los nacionalistas asumen como una "cuestión básica" que sus socios "entiendan el mensaje" de las urnas: "los ciudadanos no quieren gobiernos del BNG con algún concejal del PSdeG o viceversa".
En consecuencia, el Bloque apuesta por "extender" a los municipios el cambio que tuvo lugar en la Xunta "sustentado en dos patas", a partir de una "relación de equilibrio y en términos de igualdad" entre los integrantes de la coalición.
Por tanto, los nacionalistas reclaman que esta situación "tenga su reflejo" en los consistorios, en los que aspiran a situar gobiernos de coalición en los que quede "perfectamente claro que hay dos referentes políticos", representados por las fuerzas que los componen.
