Asegura que los nuevos plazos suponen "un enorme impulso" y apunta a la supervisión de las etapas "como garantía" de su cumplimiento
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 26 Jun. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Santiago, Xosé Sánchez Bugallo, se mostró hoy "muy satisfecho" con "los compromisos" alcanzados en relación al municipio compostelano entre el ministro de Fomento, José Blanco, y el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, en la reunión que mantuvieron esta semana y de la que destacó el "clima de confianza y colaboración".
Según Bugallo, los plazos que fijaron para las obras de entrada del AVE en la capital gallega y la nueva terminal del aeropuerto de Lavacolla suponen "un enorme impulso" y demuestran, a su juicio, "el gran interés" de Blanco en las infraestructuras gallegas.
Sobre el nuevo calendario que fija la puesta en servicio del AVE en 2015, resaltó el establecimiento de etapas como "lo más importante", por lo que apuntó a la supervisión de su cumplimiento como "garantía" para que el tren de alta velocidad "realmente llegue en 2015".
"Si en 2010 todos los tramos están en obras, habrá que darle crédito al ministro", aseveró, al tiempo que asumió que si el año que viene no están todas las obras iniciadas, plantearse "dudas" sobre su ejecución sería "muy sensato".
ADJUDICACIÓN DE LAS OBRAS DE ACCESO
Así, calificó la entrada del AVE en Santiago como "vital para Galicia", ya que "sin esa conexión no hay AVE en A Coruña, ni en Vigo, ni en Pontevedra", y recordó que el tramo, de tres kilómetros y previsto para 2012, cuenta con un presupuesto de 100 millones de euros.
A este respecto, el regidor dio a conocer que una de las propuestas que estudia el consejo de administración de ADIF para adjudicar hoy las obras --en el Consejo de Ministros-- es la de una empresa "cercana a Compostela". De recibir el proyecto, "creará trabajo y garantizará el conocimiento del territorio", subrayó.
Además, respecto a la expropiación de terrenos, aseguró que la corporación local buscará un acuerdo "justo y equilibrado" con los vecinos, pero incidió en que "grandes actuaciones públicas como esta implican un sacrificio", por lo que "no quedará todo el mundo contento".
Con todo, destacó que "de las 70 viviendas que se preveía derribar inicialmente", en este momento "ya no llegan a 30", aunque "si tienen que caer 25 casas, caerán; y si tienen que ser 40, serán", advirtió.
FALSO TÚNEL Y AUTOVÍA
Asimismo, aludió al "único cambio significativo" en la planificación de estas obras, que será la construcción del falso túnel desde Lamas de Abade hasta Combarro. "Honestamente, tuve algo que ver", agregó el primer edil, tras lo que agradeció a Blanco este compromiso.
Por otra parte, subrayó el "impulso decisivo" de la conexión Santiago-Lugo que supuso, a su parecer, la visita del titular de Fomento a la comunidad gallega.
"De los 95 kilómetros de autovía, 10 ya están construidos -- el trayecto entre Santiago y Lavacolla--, 60 ya están contratados y sólo quedan 30 por adjudicar", explicó. Este tramo es el que une los municipios lucenses de Arzúa y Gundín.
Para terminar, Bugallo hizo hincapié en que el nuevo clima entre el Gobierno central y el autonómico "es una forma muy buena de trabajar para Galicia" y aseguró que el Ayuntamiento compostelano, "desde luego", colaborará para que se cumplan las fechas previstas, lo que consideró que sería "un éxito".
