SANTIAGO DE COMPOSTELA 17 Feb. (EUROPA PRESS) -
La mayor parte de la flota pesquera continúa amarrada, por cuarto día consecutivo, en Pontevedra y A Coruña, en una jornada en la que los servicios meteorológicos mantienen la alerta roja en el litoral de ambas provincias por mar de fondo, lo que está provocando que se registre un fuerte oleaje.
Las embarcaciones de pequeño tamaño también permanecen en puerto en Lugo, pese a que en esta provincia el fenómeno adverso sigue siendo de nivel naranja, y solo faenan los buques arrastreros, tal y como atestiguan fuentes de las cofradías de Celeiro y Burela, en declaraciones a Europa Press. En Ribadeo, por su parte, los buques no han salido a la mar.
En lo que respecta a A Coruña, y tras una jornada en la que se alcanzaron olas de hasta 10 metros en la zona de Cabo Silleiro y de las Islas Sisargas, fuentes del pósito de Ortigueira advierten de que las condiciones meteorológicas son "incluso peores" este jueves, por lo que los marineros han quedado en tierra en esta localidad.
Tampoco han salido a la mar, según indican las cofradías, en Cariño, Cedeira, Ferrol, A Coruña, Malpica y Fisterra, aunque en estos dos últimos muelles sí trabajan "cuatro o cinco" buques, eso sí, en las proximidades de la costa.
Más al sur, la flota sigue en tierra en Muros y Ribeira, donde, tal y como apuntan fuentes de la cofradía, sólo pueden faenar los mariscadores.
Por último, y en lo que concierne a Pontevedra, esta vuelve a ser, un día más, una de las provincias a la que con mayor fuerza está afectando el temporal de fuertes vientos y lluvias. Por este motivo, la totalidad de los marineros han optado por no desamarrar los barcos, como informan fuentes de las cofradías de O Grove, Marín, Vigo, Bueu y Baiona.