SANTIAGO DE COMPOSTELA 6 Nov. (EUROPA PRESS) -
Un experto del Instituto Galego de Análise e Documentación Internacional (Igadi), Roberto Mansilla, cuestionó hoy las competencias del gobierno somalí para asumir una posible extradición de los piratas detenidos en España al afirmar que Somalia es un país en una situación caótica por las disputas entre clanes a fin de hacerse con el "control del territorio".
En declaraciones a Europa Press, explicó que el país africano es, desde hace años, un país marcado por una "inestabilidad elevada", la "rivalidad" entre clanes y una alta presencia de fundamentalistas islámicos, con un gobierno "anárquico", sin "competencias" sobre la región en la que se han originado los centros de piratería marítima, Putlandia.
Así, destacó que no existe un gobierno o autoridad regional al que el Ejecutivo español pueda "acudir", por lo que sostiene que posiblemente las negociaciones y contactos diplomáticos en el caso del 'Alakrana' tengan que realizarse directamente con los propios piratas. Esta situación complicaría, a su juicio, la extradición de los piratas detenidos en España, en caso de que se estudiase esta alternativa, dado que no existe un Gobierno que tenga "competencia sobre ellos".
"El Gobierno no defiende a estos piratas", afirmó, pese a exponer que la región de Putlandia llegó a plantear una "secesión" de la capital somalí, Mogadiscio. "Los clanes se han convertido en milicias armadas por las guerras civiles de los 15 y 20 últimos años", explicó. El país africano se mantuvo durante 30 años bajo un régimen socialista "orientado a la Unión Soviética", expuso, para añadir que "se sumió en el caos" con la caída de su líder, Siad Barré.
El experto del Igadi sitúa en Eyl el "principal centro" de origen de clanes dedicados a la piratería, que se ubica en una región, Putlandia, considerada en su día un santuario de grupos vinculados a Al Qaeda.
PIRATAS, PRESTIGIO SOCIAL EN PUTLANDIA
Mansilla apuntó el "prestigio social bastante elevado" del que gozan estos grupos dedicados a la piratería marítima en la que es una región caracterizada por el atraso, la pobreza y la desigualdad socioeconómica.
En este contexto, destacó la sofisticación en recursos y medios técnicos de los grupos de piratas, de los que aseguró que no son "arcaicos" y, por el contrario, indicó que tienen acceso a los últimos avances en tecnología y armas.
Como ejemplo, se refirió a su acceso y control de determinados satélites que les informan de las rutas y localización de los buques en el Cuerno de África o al uso de ordenadores portátiles, teléfonos móviles o radares. Esta dotación de recursos evidencia, a su entender, la existencia de un "gran tráfico de armas y material tecnológico en la región".