La oposición critica que no se aceptaron cambios de calado y PPdeG le atribuye "revanchismo" y "falta de voluntad" para llegar a acuerdos
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 14 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Ley de Montes de Galicia ha superado su último trámite parlamentario en comisión, por lo que está lista para su debate y votación definitivos en el pleno de la Cámara autonómica, que previsiblemente se producirán en la última sesión ordinaria de este periodo de sesiones --previsto para el martes 26 y miércoles 27 de junio--, y tras incorporar un centenar de enmiendas.
La Comisión de Agricultura ha votado este jueves el dictamen elaborado por la ponencia, al que se presentaron un total de 579 enmiendas --294 del PSdeG, 247 del BNG y 38 del PPdeG--.
Del total, han sido incorporadas 63 enmiendas --22 de los populares y 41 de la oposición--, y se llevaron a cabo 34 transacciones --cuatro de ellas a partir de textos del PP--. Además, dos enmiendas del PSOE fueron aprobadas parcialmente.
Así las cosas, el texto articulado del dictamen de la ponencia ha salido adelante con los únicos votos a favor de los diputados populares y el rechazo de los grupos socialista y nacionalista.
Durante el debate del texto, la oposición ha criticado que no se aceptaran enmiendas de calado, mientras la portavoz del PPdeG Emma Álvarez Chao ha atribuido a PSdeG y BNG "revanchismo" y "falta de voluntad" para llegar a acuerdos. "Se atreve a hablar de revanchismo cuando ustedes fueron absolutamente excluyentes", le ha replicado la diputada del Bloque Tereixa Paz.
También en este sentido, la parlamentaria del PSdeG Sonia Verdes ha mostrado la "voluntad de acuerdo" de su grupo, algo que ha visualizado en el 'acuerdo por el monte' ofrecido por el líder de los socialistas gallegos, Pachi Vázquez. Frente a esto, Álvarez Chao ha censurado el ofrecimiento, a su juicio, "publicitario", y ha resuelto que "el acuerdo hay que buscarlo en la ponencia".
CRÍTICAS DE LA OPOSICIÓN
En cuanto a las discrepancias en el contenido de la futura ley, PSdeG y BNG han vuelto a reprochar un modelo "forestalista y productivista", que "acerca el fuego a las casas" al modificar "el núcleo" de la Ley de prevención y defensa contra incendios forestales.
Así, Paz ha reprobado la filosofía "mercantilista" en la que, en su opinión, se basa el documento, que busca "un nuevo nicho para la especulación" y, con este objetivo, permite "que se puedan forestar incluso las tierras agrarias".
En su intervención, al igual que posteriormente Sonia Verdes durante su discurso, la parlamentaria del BNG ha echado en falta la elaboración de una "estrategia forestal" para ordenar el aprovechamiento del monte gallego, teniendo en cuenta que la Comunidad gallega es "una potencia" en la materia y ha denunciado la posibilidad que habilita la norma para que se planten masas monoespecíficas "de más de 50 hectáreas". Esto, ha advertido, supondrá hacer del monte "un polvorín".
Por su parte, Verdes ha calificado de nuevo la ley de "incendiaria" y ha acusado al Gobierno de la Xunta de "dejar solos a los vecinos y a los ayuntamientos ante los fuegos".
Asimismo, ha considerado que la nueva ley constituirá el "hachazo final" a las políticas de desarrollo sostenible del medio rural gallego, por lo que ha aseverado que el PSdeG "no puede estar de acuerdo" con ella.
"DIÁLOGO Y CONSENSO"
Ante estas acusaciones, Álvarez Chao ha exhibido el "trabajo importante de diálogo" y "consenso" del Ejecutivo autonómico, plasmado en "más de 30 reuniones" con las 20 asociaciones que conforman el Consello Forestal de Galicia. A mayores, ha argumentado que el proyecto de ley de la Consellería de Medio Rural fue redactado a partir del que dejó sobre la mesa la anterior Xunta bipartita.
Ya por último, ha justificado los cambios en la Ley de prevención y defensa contra incendios forestales --a la que se ha referido como una de las norma "más preciadas" del Gobierno bipartito-- para dotarla de "operatividad" mediante la "clarificación" de conceptos.
