PONTEVEDRA 28 Abr. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Diputación de Pontevedra, Rafael Louzán, junto con los alcaldes del Partido Popular de los municipios de Sanxenxo, Ribadumia, Meaño y Meis denunciaron hoy "los problemas" que están causando las obras de desdoblamiento de la Vía rápida de O Salnés.
"Con esta chapuza se está cometiendo un atropello con los vecinos" afirmó Louzán que calificó la situación de "maltrato por parte de los responsables de la Xunta".
En un acto público celebrado esta mañana en Meis ante un centenar de vecinos afectados, el regidor de esta localidad, José Luis Pérez, explicó el "daño enorme" provocado por el importante movimiento de tierras a consecuencia de las obras, que "ha alterado el tránsito de las aguas en algunos lugares, ha dejado sin servicio gran número de viales y ha incomunicado a algunos lugares".
"Aguantamos todo lo aguantable, pero llega un momento en el que hay que decir basta", espetó el regidor de Meis, quien instó a la Consellería de Política Territorial a que "corrija estas deficiencias" ya que, de no ser así, tendrán "que tomar otro tipo de medidas, que no les gustan".
FALTA DE RESPETO.
Para el alcalde de Meaño la actitud de los responsables de Política Territorial supone una "falta de respeto" a los propietarios colindantes a la futura autovía, e instó a la empresa que ejecuta las obras a que "agilicen estos trabajos tan importantes para los vecinos".
En este mismo sentido se pronunció la alcaldesa de Sanxenxo, Catalina González, que tras subrayar la importancia de esta infraestructura exigió "diligencia para corregir los problemas causados". Por su parte, la primera edil de Ribadumia, Salomé Peña, insistió en la "urgencia para encontrar una solución".
El director de Infraestructuras de la Diputación, Agustín Hernández, mostró un informe con material videográfico de los daños originados por la obra y cifró en un 1,5 millones de euros el coste total del arreglo de todos los desperfectos.
Según las previsiones de la Xunta de Galicia, la autovía de O Salnés se abrirá al tráfico a principios de verano, con un retraso de cuatro meses, pues la inauguración estaba prevista inicialmente para el mes de febrero, pero que se pospuso debido a que hubo que sustituir los tubos de drenaje que se habían deteriorado y habían provocado hundimientos en la calzada.