SANTIAGO DE COMPOSTELA, 3 Mar. (EUROPA PRESS) -
La moción de censura presentada por el PP y el PSOE contra el alcalde de Catoira, Xan Castaño (BNG), carece del aval de la dirección provincial del PP de Pontevedra, que, a la espera de conocer los detalles sobre el movimiento, abre la puerta a emprender sanciones contra sus ediles en la corporación arousana.
Así lo ha confirmado el presidente del PP de Pontevedra, Alfonso Rueda, quien, a preguntas de los medios este martes en A Illa (Pontevedra) tras conocerse la noticia, ha manifestado que la moción "no fue consensuada ni tiene la autorización" de la dirección del partido.
Rueda ha emplazado a conocer los detalles sobre la moción de censura propiciada por el exalcalde y portavoz socialista, Alberto García, y su homólogo en el PP, Iván Caamaño, que ofrecen este martes una rueda de prensa para presentar los detalles del acuerdo por el que, previsiblemente, desbancarán al BNG de la Alcaldía de Catoira.
Tras indicar que el movimiento de populares y socialistas no sorprende a la dirección provincial porque "las conversaciones" entre ambas formaciones "fueron reflejadas hasta en los medios", el también número dos de la Xunta ha subrayado que el PP "no está de acuerdo" con la presentación de la moción en Catoira, que se produce a poco más de un mes para las elecciones autonómicas.
"Con independencia de que haya campaña o no, lo que intentamos es ser serios en el PP de Pontevedra. Cuando se da un paso tan importante como este, si estamos de acuerdo lo decimos y si no, es porque en principio creemos que puede no ser beneficioso", ha indicado Rueda.
"Vamos a escucharlos, hablaremos con ellos y, en función de eso, se tomarán las medidas oportunas", ha añadido el presidente del PP pontevedrés sobre la posibilidad de imponer sanciones contra sus ediles. "Lo que estoy diciendo ya indica un poco cuáles pueden ser los pasos a seguir", ha apostillado.
MOCIÓN DE CENSURA
El socialista Alberto García, alcalde de Catoira desde la década de 1980, perdió la mayoría absoluta en las elecciones municipales de mayo de 2019 al caer a los cinco ediles en una corporación de once. Los seis restantes se repartieron a partes iguales entre BNG y PP.
Los populares apoyaron con sus votos la elección del nacionalista Xan Castaño durante la sesión de investidura en la que obtuvo el bastón de mando lo que supuso el fin de las tres décadas del socialista Alberto García al frente del ayuntamiento arousano.
El apoyo de los populares a Castaño motivó la apertura de un expediente por parte de la Executiva Nacional del BNG por una posible violación de las directrices sobre pactos de sus estatutos.
La dirección de la formación frentista impuso, finalmente, una sanción de seis meses de suspensión de militancia al atender las alegaciones presentadas por sus representantes locales, que negaron la existencia de un acuerdo con el PP para hacerse con el bastón de mando de la localidad. El castigo expiró a mediados del pasado mes de diciembre al empezar a contar justo después de la sesión de investidura.