La presidenta amplía hasta el viernes el plazo para que los grupos respondan a la propuesta de nuevas normas de visitas

Reunión de Rojo con los portavoces parlamentarios
EUROPA PRESS
Actualizado: miércoles, 6 febrero 2013 20:27

El plazo inicial dado por la jefa del Legislativo venció sin que ninguno de los partidos remitiese alegaciones a la propuesta


SANTIAGO DE COMPOSTELA, 6 Feb. (EUROPA PRESS) -

La presidenta del Parlamento, Pilar Rojo, ha ampliado hasta el viernes el plazo para que los diferentes grupos respondan a su propuesta sobre las nuevas normas que regirán la asistencia de público a los plenos de la Cámara autonómica, después de que el PSdeG se quejase del tiempo que se dejó de margen.

De esta forma, y ante las críticas para responder al documento, la jefa del Legislativo gallego, que espera que "no surja ningún impedimento más achacable a la Presidencia", ha aumentado el tiempo para responder con el deseo de que "nadie se sienta presionado por el tiempo", según han indicado a Europa Press fuentes parlamentarias.

Es por ello que no sólo se muestra dispuesta a dar 24 horas más de plazo, sino "incluso 48 horas" a los grupos parlamentarios. Al respecto, aguarda que esta vez "sean suficientes para analizar el folio de propuestas, elaborado de acuerdo con lo hablado en la Mesa y Xunta de Portavoces", órganos que se han reunido este martes.

Las mismas fuentes reiteran la voluntad de "diálogo" de la presidenta, pero advierten de que si finaliza este plazo sin acuerdo o propuestas, las medidas serán de aplicación en el próximo pleno de la Cámara.

"¡QUE NO SEA POR FALTA DE TIEMPO!"

"La petición de tiempo alegada por el PSdeG será atendida. ¡Por supuesto, que no sea por falta de tiempo!", han apuntado las mismas fuentes después de que ninguno de los grupos remitiesen alegación alguna tras el borrador de medidas que trasladó este martes la presidenta de la Cámara.

De esta forma, Pilar Rojo se muestra "comprensiva" con la petición realizada, singularmente por los socialistas, si bien las mismas fuentes ironizan con que entiende que "a veces se necesite tiempo para analizar un folio". "Está dispuesta a facilitar al PSdeG ese tiempo para estudiar el documento", apostillan.

VENCE EL PLAZO SIN PROPUESTAS

Los grupos parlamentarios de la oposición no respondieron a la propuesta de la presidenta de la Cámara en el plazo establecido inicialmente, hasta las 14.00 horas, después de que este martes hubiese remitido un borrador a las tres formaciones con representación en el Pazo do Hórreo.

Las razones para no haber respondido, que se extienden a todas las formaciones, difieren en según el caso. Así, los socialistas consideraron que el plazo dado era insuficiente y que, por lo tanto, no se sentían "vinculados" con él, ya que fue una decisión "unilateral", según han indicado a Europa Press fuentes del PSdeG.

De esta manera, el principal partido de la oposición, el único que tiene representación en la Mesa del Parlamento --órgano rector-- junto al PP, decidió tomarse más tiempo para estudiar la propuesta remitida por la jefa del Legislativo.

Alternativa Galega de Esquerda (AGE) parte de una postura contraria a normas que prohíban explícitamente exhibir pancartas o camisetas porque, a juicio de esta formación política, esto no atenta contra la "dignidad" de la Cámara. El propio portavoz parlamentario del PPdeG, Pedro Puy, resumió las discrepancias entre los grupos en que todos están de acuerdo con que hay que preservar la "dignidad", pero no coinciden en la definición del concepto.

Por su parte, el BNG no ha enviado ninguna respuesta a la jefa del Legislativo autonómico porque, como ha manifestado en declaraciones a Europa Press su portavoz parlamentario, Francisco Jorquera, los nacionalistas "no va a suscribir ningún acuerdo" que incorpore nuevas normas a las ya establecidas.

"Si la presidenta considera necesarias, bajo sus atribuciones y su responsabilidad, nuevas normas, nosotros no vamos a hacer aportaciones y no vamos a suscribir ningún acuerdo", ha explicado el dirigente nacionalista.

Por su parte, los populares están de acuerdo con el texto remitido con la presidenta y, por lo tanto, asumen las nuevas reglas de comportamiento en aras de mantener el orden parlamentario, como aseguró su portavoz, Pedro Puy, tras la Xunta de Portavoces.

PROPUESTA DE LA PRESIDENTA

En el borrador de la presidenta se incluye el deber de que los invitados firmen unas normas de comportamiento parlamentario si quieren entrar en el hemiciclo gallego para presenciar un pleno. De no hacerlo, los invitados podrán seguir el desarrollo de la sesión desde las instalaciones del grupo parlamentario por el que han tramitado el convite.

Asimismo, en el caso de expulsión del salón de plenos por desorden en las tribunas, los invitados "no podrán asistir a la Cámara en el resto de la legislatura", sin perjuicio de otras consecuencias previstas en el reglamento, aunque sí tendrán derecho a acceder a los locales de los grupos, "previa invitación" de las fuerzas parlamentarias.

El documento, con siete puntos, especifica que los invitados "deberán abstenerse de portar pancartas, estandartes o emblemas de todo tipo que contengan mensajes que no respeten el comportamiento previsto" en Reglamento del Parlamento en su artículo 109, relativo a los invitados.

En este artículo, se prevé que "cualquier persona que en el recinto parlamentario, en sesión o fuera de ella, promueva desorden grave con su conducta de obra o palabra, será inmediatamente expulsada".

Además, según lo dispuesto en este apartado, el presidente tiene el deber de "velar", en las sesiones públicas, por el mantenimiento del orden en las tribunas. En este sentido, la Presidencia de la Cámara puede indicar la expulsión de quien "perturbe" el orden o falte a la debida compostura y, de ocurrir, los servicios de seguridad de la Cámara pueden levantar las diligencias oportunas, "por si los actos producidos pudiesen ser constitutivos de delito o falta".

CONSECUENCIAS PARA LOS GRUPOS

El documento trasladado por Pilar Rojo, elaborado junto a los servicios jurídicos de la Cámara, también propone responsabilidades para los grupos parlamentarios, que serán "responsables" de dar "cumplida información a los invitados" del articulado del Reglamento en lo relativo a los invitados dentro del recinto del Pazo do Hórreo.

De esta manera, los grupos parlamentarios tendrán consecuencias si sus invitados son expulsados del hemiciclo, y, concretamente, se quedarán sin cupo de invitados en la siguiente sesión. "En caso de reincidencia, el cupo se perderá, como mínimo, para un periodo de sesiones o tiempo equivalente", añade el texto.

En el caso de que se produzcan "alteraciones del orden" durante el transcurso de un pleno, según lo que indica el documento, "los servicios de seguridad remitirán un testimonio de los hechos a la Mesa del Parlamento para "su traslado a la autoridad judicial".