SANTIAGO DE COMPOSTELA, 24 Sep. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, confía en que "entre todos", el apoyo de las administraciones y la buena marcha de los empresarios, la previsible desaceleración económica en 2008 "sea suave y no se convierta en brusca".
En su opinión, las actuales "turbulencias financieras no deberían de tener una consecuencia demasiado grave en la economía real de la economía española", pues destacó que las entidades financieras y las aseguradoras "están sólidas", las empresas "están funcionando bien este año" y se prevé acabar con un crecimiento del 3,7 por ciento. "Seguimos por encima de la media europea y manteniendo ese diferencial positivo", subrayó.
Tras reunirse con el presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, el máximo responsable de la patronal española admitió que "es verdad que se están notando una desaceleración en lo relativo a la vivienda", pero añadió que "es algo que ya se sabía que iba a suceder, y está empezando", pero alertó de que "no es bueno que ocurra a la vez de las turbulencias a nivel mundial".
Para Gerardo Díaz Ferrán, la receta para que "la desaceleración sea suave" tiene que cumplir tres condiciones: "que los bancos centrales no dejen de inyectar liquidez al sistema financiero, que las entidades españoles sigan suministrando a las empresas los créditos que necesitan para su funcionamiento y que las administraciones atiendan las sugerencias empresariales".
"Si estas tres premisas se cumplen, tenemos que mirar el año 2008 con menos pesimismo que si alguna de las tres falla. También sería deseable que se aclaren estas turbulencias financieras que existen a nivel mundial", expuso.
GALICIA CRECERA UN 3,9% EN 2007.
Por su parte, el titular del Ejecutivo autonómico, Emilio Pérez Touriño, avanzó que prevé que Galicia "cierre este año con un crecimiento del 3,9 por ciento", lo que supondría dos décimas más que la media española.
Para el próximo ejercicio, precisó que las estimaciones se están realizando en el trabajo de elaboración de los presupuestos autonómicos, pero confirmó que la economía gallega crecerá el 3,4 por ciento, la cifra apuntada ya a empresarios y sindicatos en sus reuniones previas con el conselleiro de Economía, José Ramón Fernández Antonio.