La Cámara de Comercio sitúa la previsión de crecimiento de la economía balear al 2,4 por ciento en 2008

Gual plantea la necesidad de incrementar la obra pública para compensar la construcción y reivindica proyectos para Mallorca

Europa Press Islas Baleares
Actualizado: viernes, 16 mayo 2008 19:47

PALMA DE MALLORCA, 16 May. (EUROPA PRESS) -

La Cámara de Comercio de Mallorca confirmó hoy que la economía balear seguirá creciendo en 2008 aunque situó la previsión al 2,4 por ciento, apuntando asimismo a un aumento de las probabilidades de crecer a una tasa más baja, según se desprende de los datos estadísticos del Boletín de Situación Económica (BSE) de 2007 presentado hoy.

Según los informes elaborados por el Departamento de Estudios de la Cámara de Comercio, presentados por el presidente de la entidad, Juan Gual, y por la directora del departamento, Catalina Barceló, el consumo interno ha mostrado los primeros síntomas de ralentización y la inversión también muestra síntomas de moderación.

En concreto, la tasa interanual de confianza empresarial o Indicador de Confianza Empresarial (ICE) disminuye en la comunidad, pasando de 7,2 puntos en el primer trimestre de 2007 a -14,9 en el mismo período de 2008, pero las perspectivas se muestran más optimistas para el segundo trimestre, con 4,3 puntos. No obstante, a juicio de Barceló, la cifra puede reflejar un "deseado optimismo" que luego no coincida con la realidad.

Durante el acto, Gual y Barceló analizaron las claves del nuevo escenario como consecuencia de la crisis crediticia mundial, de alcance y evolución desconocidos, situación que ha llevado a revisar a la baja los índices de crecimiento económico, que, pese a ello, siguen siendo positivos.

Los factores que pueden influir en su descenso para 2008 son, además de la moderación de las economías nacional y mundial, las continuas subidas del precio de las materias primas (petróleo y alimentos), y la apreciación del euro. El empresariado destaca la intensa competencia y la debilidad de la demanda como principales factores limitadores de su actividad.

Al mismo tiempo, el sector servicios continúa siendo el más dinámico y conserva el pilar de crecimiento de la economía balear, impulsado, básicamente, por la actividad turística. El sector de la construcción se mantiene un crecimiento activo, aunque se contrae a causa de la disminución de la construcción residencial de viviendas colectivas. Paralelamente, los empresarios del sector son los que se muestran mayor pesimismo.

REIVINDICACIÓN DE PROYECTOS PARA MALLORCA Precisamente, el presidente de la Cámara de Comercio se mostró optimista en cuanto a la marcha de la economía balear, especialmente por las buenas perspectivas que se plantean en el sector turístico, y destacó el mercado alemán como el segmento clave para la comunidad.

Asimismo, aludió a la oportunidad para invertir en bienes de equipo e instalaciones en el sector turístico para mantener su dinamismo. Gual también hizo referencia a la necesidad de incrementar la obra pública para compensar el descenso de construcción privada y aprovechó para reivindicar proyectos que considera "imprescindibles", como son el Palacio de Congresos, la ampliación del puerto, y más centros sanitarios y escuelas. A su juicio, además, la construcción privada volverá a activarse porque en Baleares "no existe un gran stock de viviendas" y la demanda se mantendrá.

El máximo representante de la Cámara de Mallorca señaló la conveniencia de fragmentar el análisis de los sectores para hacer una valoración global de la economía balear que, dijo, "permite no hablar de una mala situación". Gual destacó que hay que tener en cuenta que los rendimientos empresariales no son negativos, sino que el crecimiento se ralentiza y que confía en que la situación cambie si se produce la esperada bajada de tipos de interés, lo que reactivará el consumo.

En 2008, el crecimiento nacional también se reajusta a la baja y se sitúa entre el 1,8% y el 2,2%, sobre todo a causa del descenso del consumo privado, dada la elevada inflación. Las exportaciones entran en un panorama de moderada actividad por la desaceleración de la economía americana (2% en 2008) y la apreciación de la moneda (1,54 euros/dólares).

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