Galmés garantiza que "de ninguna de las maneras" se cerrarán 150 guarderías con la aprobación del decreto

Actualizado: martes, 18 marzo 2008 15:51

PALMA DE MALLORCA, 18 Mar. (EUROPA PRESS) -

La consellera de Educación y Cultura, Bárbara Galmés, garantizó hoy que "de ninguna manera" se cerrarán 150 guarderías de Baleares con la aprobación del decreto de regulación que prepara el Govern, al tiempo que recalcó que se ha abierto un proceso "muy amplio" para que los centros de educación de cero a tres años dispongan ed tiempo suficiente para obtener la pertinente autorización. En concreto, detalló que un 70% de las escoletes de las islas están en fase de autorización.

Así lo manifestó Galmés en los pasillos del Parlament, donde constató que existe "un problema de desinformación" en torno al decreto, e insistió en que lo único que desde la Conselleria se ha dicho es que "por cada tres unidades escolares, deberá de haber un maestro".

Galmés explicó que el decreto de Primera Infancia está en fase de aprobación y subrayó que cuenta, además, con el apoyo del Consell Escolar de les Illes Balears, con un total de 19 votos a favor y dos en contra, a lo que añadió que "es necesario que se conozca" este apoyo mayoritario, en alusión al rechazo expresado desde las patronales Escola Católica y la Federación de Escuelas Infantiles (Pimeb) en contra del decreto, y que hoy hicieron entrega al Govern de 3.000 firmas pidiendo la retirada de la norma.

En este sentido, la titular de Educación defendió que la labor del Ejecutivo se limita a "regular un tramo de la educación que preocupa mucho a las familias". Del mismo modo, aseveró que se reconocerá el trabajo de los profesionales, pero dando oportunidad a los maestros y monitores a obtener una "calificación profesional mínima, totalmente práctica".

En su comparecencia ante los medios, también afirmó que "siempre se ha contemplado este tramo educativo como un tramo fundamental para la educación de nuestros alumnos y para la seguridad de las familias, y además añadió que "debemos ser modernos y acercarnos a este servicio de calidad", afirmó la consellera.

La consellera afirmó "no entender" la campaña que desde la Escuela Católica y la Pimem se está llevando a cabo, ya que va en contra de este plan que "por primera vez dará un servicio de calidad" que "es lo que piden las familias.

Galmés recordó que se ha dado un plazo de seis años para que estos centros se pueden regularizar y aclaró que "no hay ningún motivo para que suban los precios", en relación a las afirmaciones que se han realizado por parte de la Escuela Católica y la Pimem.