El experto propuesto por la defensa asegura que la mujer "tomó dosis suicidas" de alcohol y ansiolíticos
PALMA DE MALLORCA, 17 Jun. (EUROPA PRESS) -
Un perito ha declarado este lunes en el juicio por el presunto asesinato de un hombre en Cala Millor en 2016 que la concentración de diazepam encontrada en la sangre de la víctima era demasiado baja para haberle dejado inconsciente.
Así se ha expresado el médico, propuesto como perito por la defensa, durante la quinta sesión del juicio, en el que la Fiscalía acusa a una mujer rusa de 49 años de asesinar a su marido, un alemán de unos 70 años, y pide para ella 25 años de cárcel. El fiscal sostiene que la mujer sedó al hombre para mutilarlo y dárselo de comer a sus perros, y la mujer lo niega y culpa a los animales.
Durante su intervención en el juicio, el perito ha indicado que las concentraciones de diazepam halladas en el cuerpo del fallecido no podrían "dejar K.O. a nadie", y que su estado sería "normal".
ELLA TOMÓ "DOSIS SUICIDAS" DE ALCOHOL Y ANSIOLÍTICOS
El primer día, la acusada declaró que fue el perro quien atacó espontáneamente a su esposo, que ella intentó impedirlo sin éxito y que cuando comprendió que él había muerto intentó suicidarse ingiriendo vodka y ansiolíticos.
En este sentido, el perito propuesto por la defensa ha corroborado que la mujer había tomado "dosis suicidas" de alcohol y zolpidem, un hipnótico que, entre otros efectos, en grandes dosis puede causar insuficiencia respiratoria y coma, así como amnesia.
En la casa se halló un blíster de este medicamento con una huella de sangre por contacto -es decir, que alguien tocó la caja con las manos manchadas de sangre-, en el que faltaban varias pastillas. También se encontró otro blíster de diazepam en el que igualmente faltaban pastillas.
"TOTALMENTE POSIBLE" QUE LA MUJER NO SE ACUERDE DE NADA
Por ello, el médico considera "totalmente posible" que la mujer "hiciera cosas por la casa sin que se acuerde de ello". Por ejemplo, considera muy probable que la mujer fuera quien arrastró el cuerpo, ya que "se ven manchas de arrastre". "Lo tuvo que hacer ella, y no tiene ningún recuerdo de eso", ha dicho. Según el facultativo, con "dosis tan tóxicas" en su organismo era "imposible" que pudiera "acordarse de lo ocurrido".
En función del elevado nivel de alcohol en sangre de la acusada, -cuando, ya detenida, fue llevada al Hospital de Manacor-, el médico calcula que la mujer tenía "dosis muy tóxicas" etílicas hacia las 17.00 horas y antes, teniendo en cuenta que no pudo consumir nada desde que fue esposada por la Guardia Civil en la vivienda.
El facultativo estima que la intoxicación de la mujer duró unas seis horas, y que en las primeras dos horas y media "debió estar en situación comatosa". El perito ha apuntado que, como médico, hubiera recomendado su ingreso hospitalario durante varios días.
El juicio concluirá este martes con los informes definitivos del fiscal Gonzalo Sans y el letrado de la defensa, Bartolomé Salas, y después la acusada tendrá derecho a la última palabra.
